U na fiscal pidió ayer sendas penas de tres años de prisión a una madre y a su novio por maltratar a una niña de tres años. Los dos están acusados de arrancar el pelo y golpear a la pequeña, según precisó el abogado de la acusación particular. La representante del Ministerio Público solicitó al concluir el juicio que los acusados no tengan contacto con la pequeña en cinco años y que la madre pierda la patria potestad. La psicóloga que examinó a la menor explicó que «la niña describió cómo le pegaba su madre». La presunta víctima está actualmente viviendo con su padre biológico, que ayer recriminó en el juicio a los acusados que maltrataran a la pequeña.

Los hechos supuestamente ocurrieron en marzo de 2005 en la vivienda de los acusados en Alicante. El padre de la niña descubrió que su hija presuntamente estaba siendo maltratada y decidió llevarla al hospital. Los médicos comprobaron que la niña tenía hematomas por todo el cuerpo - sobre todo en las nalgas y la cara - y tres mechones de pelos supuestamente arrancados. La forense que examinó a la pequeña explicó ayer a la juez que «todo indica que fue agredida porque eran lesiones típicas de maltrato».

Los dos acusados negaron haberle puesto la mano encima a la menor. La madre insistió en que los moratones que tenía su hija eran en realidad dermatitis. «Yo nunca le he pegado. La denuncia me sorprendió por completo», aseguró la denunciada.

El padre de la pequeña apuntó que su hija le comentó que su madre le pegaba. «Una vez le hizo comérse su propio vómito. A mi hija le han dado muy fuerte. Cuando la recogí llena de hematomas estaba destrozada», advirtió el padre.

El director del colegio de la pequeña explicó en el juicio que la acusada achacó los moratones a que había sufrido un accidente en el centro escolar, «pero no era cierto. No era una niña que se cayera con frecuencia».

La fiscal pedía inicialmente que los dos acusados fueran condenados a sendas penas de un año de cárcel, pero al acabar el juicio elevó su petición a tres años de prisión por la gravedad de los hechos denunciados. Además, la representante del Ministerio Público reclamó que se inhabilite a la madre durante cinco años para el ejercicio de la patria potestad y que durante cinco años ella y su pareja se mantengan alejados de la menor. La madre lleva dos años sin poder ver a la niña ya que tiene una orden de alejamiento en vigor.