?Francisca Hernández, lidera un equipo de investigación en la Escuela Politécnica de Orihuela que consiste en experimentar con las plantas para someterlas a estrés hídrico o, lo que es lo mismo, el riego deficitario controlado. «Debemos ser capaces de ahorrar agua y crear producciones rentables de frutos de alta calidad. Con la aplicación de estrategias de riego deficitario, ya sea controlado, sostenido o parcial de las raíces se consigue un ahorro de agua de hasta el 30% en algunos cultivos frutales», apunta esta investigadora que también trabaja con cultivos emergentes que necesiten menor agua para su producción. Algo que hay que conjugar también con el hecho de que sean rentables en los mercados», subraya Francisca Hernández.