El pasado mes de junio, la Conselleria de Transparencia, Responsabilidad Social, Participación y Cooperación comunicó a los 37 ayuntamientos con los que mantenía en vigor el convenio de gestión del Buzón Ciudadano que iba a proceder a su cierre definitivo. En las semanas siguientes, estos municipios de toda la Comunidad Valenciana, comenzaron a aceptar las indicaciones de la Conselleria y daban por finiquitada esta plataforma para gestionar propuestas, consultas o sugerencias de la ciudadanía.
La Generalitat puso en marcha el Buzón Ciudadano en 2010. A través de un sencillo mecanismo (que todavía está activo en Internet), se hacían llegar a Valencia las quejas que afectaba a cada municipio. Ahí es donde este sistema empezó a fallar, según asegura la directora general de Transparencia y Participación, Aitana Mas. «El buzón que creó Rafael Blasco era anormal. Nosotros recibimos quejas sobre la ineficiencia de la herramienta, al no ser un acceso directo entre ciudadanía y administración local. Y sobre todo, era una forma de conseguir información partidista de una localidad. Blasco utilizaba el buzón para enterarse de las quejas vecinales en municipios donde no gobernaba el PP y pasarle la información a sus agrupaciones que estaban en la oposición», explica Mas.
Además de los motivos políticos, el uso del buzón fue limitado. «Se invirtieron casi 60.000 euros en mantenimiento que beneficiaba a 153 municipios de los 542 que existen en toda la Comunidad Valenciana. Y solo en menos de 20 poblaciones funcionaba de verdad. En Crevillent, que es mi localidad, se quejaron de la eliminación del buzón y sólo se presentó una queja en todo el año 2016», cuenta la directora general.
A cambio de eliminar la plataforma, la Conselleria ha optado por aumentar las subvenciones para que cada consistorio desarrolle su propio sistema. Así, en 20015 se destinaron 100.000 euros para transparencia en municipios; en 2016 -primeros presupuestos del Pacto del Botánic- 200.000 euros; en 2017, 350.000 euros, y para 2018 se han previsto dedicar 750.000 euros. La intención del Consell es publicar la convocatoria en marzo para que sea efectiva lo antes posible.
«Es la gran apuesta del Consell -recalca Aitana Mas-, dirigida especialmente a los 360 municipios de la Comunidad con menos de 5.000 habitantes». Mas añade que la Generalitat «no plantea una alternativa para crear una aplicación porque esa es una labor más propia de las Diputaciones».
La realidad actual, visible en Internet, es que hay una disparidad entre municipios a la hora de gestionar sus portales de transparencia. «Existe voluntad de cumplir con la Ley, pero hay una clara falta de recursos. No piden dinero, piden personal, piden manos, ya que un ayuntamiento no se puede permitir automatizar su sistema cuando el informático municipal no da a basto», comenta Mas.
Mientras tanto, hay ayuntamientos, como Torrevieja, que siguen incluyendo en su web el enlace a una plataforma que no funciona; otros como Sant Joan d'Alacant, donde la edil de Participación Ciudadana señaló días atrás que «lamentablemente la Conselleria ha decidido cerrar los buzones ciudadanos y lanzar una nueva plataforma de la que aún no nos han informado»; otros como Benidorm, que tiene un servicio para «subsanar en 72 horas máximo las pequeñas reparaciones en la escena urbana»; y otros como Alcoy, que ha creado un canal de comunicación para que «los ciudadanos puedan continuar haciendo llegar al ayuntamiento todas aquellas propuestas, consultas o agradecimientos relacionados con cuestiones de competencia municipal».
