Tras una primera reunión en la que quedaron en tablas, el PSOE y Compromís volverán hoy a verse las caras dentro de las negociaciones a dos bandas para «resetear» el pacto de gobierno y tratar el futuro del alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, investigado por una juez por el presunto fraccionamiento de contratos y por Fiscalía por el despido de la cuñada del portavoz municipal del PP, Luis Barcala. De hecho, la continuidad de Echávarri sigue siendo el principal escollo a salvar entre dos formaciones que comparten el gobierno en Alicante, la Generalitat y casi 300 ayuntamientos en toda la Comunidad.
Según explicó al término de la reunión el coordinador local de Compromís, Natxo Bellido, su formación entregó a los socialistas un decálogo con «propuestas» para «refundar» el pacto de gobierno. Entre ellas, según fuentes próximas a la reunión, se encuentra la salida de Echávarri de la Alcaldía, un punto recogido en el acuerdo avalado recientemente por la asamblea local de Compromís, donde se señala como «condición absolutamente imprescindible» para que Compromís no abandone el equipo de gobierno. «Las posiciones de ambos son conocidas. Vamos a dar la oportunidad al diálogo hasta el último minuto para ver si llegamos a puntos de acuerdo», apuntó ayer Bellido, que no quiso entrar a valorar en detalle el futuro del alcalde.
Los socialistas, según prosiguió el líder local de Compromís, se comprometieron ayer a contestar en un plazo de 24 horas. De hecho, está previsto que los negociadores de ambas formaciones se vuelvan a reunir hoy, al mediodía, para continuar con un diálogo al que, por ahora, sigue sin estar invitado Guanyar Alacant.
Sobre la presencia del otro socio del tripartito, el secretario de Relaciones Institucionales y Acción Territorial, Carlos Fernández Bielsa, apuntó que la formación que lidera Miguel Ángel Pavón «tiene que reflexionar sobre el papel que quiere jugar en el futuro gobierno de Alicante».
Para el miembro de la Ejecutiva del PSPV, Guanyar tendrá «las puertas abiertas» en la negociación cuando piense sobre su posición «desde la lealtad, el trabajo y la no confrontación». Por su parte, Bellido fue un paso más allá y emplazó a los de Pavón a una reunión, también a dos bandas y por ahora sin el PSOE, «cuando ellos quieran».
Antes del encuentro de ayer, Pavón volvió a criticar la negociación de sus dos socios. «La celebración a dos bandas de la reunión nos parece un desprecio intolerable hacia los 28.000 ciudadanos de Alicante que votaron a Guanyar las pasadas elecciones», señaló Pavón, quien situó a su formación como «pieza esencial» del gobierno en Alicante: «Sin Guanyar no hay cambio posible».
Ruido y desconfianza
En la reunión celebrada ayer entre PSOE y Compromís, que se prolongó durante unas dos horas, se intentó avanzar en las cuestiones que «unen» a las dos formaciones, dejando a un lado las cuestiones que provocan más divergencias, principalmente la continuidad de Echávarri al frente de la Alcaldía.
Entre los asuntos que se abordaron destacaron los referentes al funcionamiento interno del tripartito, la falta de coordinación y el «ruido» que ha envuelto la gestión durante todo este mandato debido a las tensas relaciones existentes entre los socios y a la desconfianza interna.
«Ambos compartimos la necesidad de refundar el pacto de gobierno, de mejorar las cosas. Hemos analizado qué dinámicas debemos cambiar, el ruido que ha envuelto la gestión para ponerle freno», apuntó Bellido. Para el socialista Fernández Bielsa, ambos partidos tienen «voluntad clara de llegar a un acuerdo». Por ello, según destacó, los ocho negociadores salieron juntos de la reunión de ayer.
El PSOE estuvo representado en Fernández Bielsa y Ana Barceló (de la Ejecutiva del PSPV) y Carlos Giménez y Pedro Boj (de la Ejecutiva local). Por Compromís acudieron Emili Mira y Amparo Piquer (cosecretarios de Organización de Compromís), junto a Bellido e Ismael Vicedo (de la dirección local de la coalición).
