La hostelería y el comercio de Alicante abundan en la repercusión doblemente negativa que tendrá para la ciudad el que el Puerto deje de ser base de cruceros en 2018 al perder a la compañía Pullmantur, la única gran naviera que había apostado por Alicante como salida de algunos de sus buques; y el que la compañía Costa Cruceros no haya programado escalas para el año que viene después de realizar trece en 2016 que trajeron a 45.000 pasajeros.

La presidenta de la Asociación Provincial de Hostelería, María del Mar Valera, aboga por una cumbre del sector turístico con las navieras para abordar la oferta que necesitan. «Los museos, la isla de Tabarca, vestir el Castillo, sacar adelante las rutas, darle otro atractivo y movimiento a la ciudad...Algo que se tenía que haber hecho hace años».

En su opinión, se está produciendo un negativo efecto dominó. «No se trata de que se van unas navieras pero vienen otras, como dice el Ayuntamiento, sino de que se queden las que están y de que vengan más. Lo otro es como conformarse».

El comercio valora también negativamente la pérdida de cruceros. Domingo Martínez, presidente del Colectivo de Comerciantes por Alicante, admite que «no es nada positivo. Se pierde el puerto base». No obstante, no lo ve una hecatombe, dijo, porque Alicante lo llevaba siendo sólo dos años, y tiene la sospecha de que las navieras están tomando decisiones para presionar al Ayuntamiento y al Puerto con el fin de conseguir otras metas, «algún beneficio económico, como la rebaja de tasas». El vicepresidente del Colectivo, Vicente Armengol, admite que es «una bofetada, está claro. Tenemos una de cal y dos de arena. Hay que volver a conseguir ser puerto base de Pullmantur o de quien sea, hay que sumar», dijo.

Por otra parte, la asociación Alicante por el Turismo de Cruceros informa de que está gestionando la recuperación de la ciudad como destino de Costa Cruceros mediante los contactos que su presidente, Francesco Balbi, también director de Operaciones de la terminal, realizó en la feria de Hamburgo al más alto nivel. Sin embargo, nada dicen de la fuga de la compañía Pullmantur que convertía a Alicante en puerto base pese y que los expertos consideran que es una pérdida más grave. Añaden que desde hace meses la asociación, integrada por diversas entidades, trabaja en diversas propuestas para relanzar el sector.