La quiebra de la compañía Monarch ha dejado, de momento, sin medio de transporte a los cerca de 700.000 pasajeros que movía la compañía entre el aeropuerto de Alicante y Elche y las cinco ciudades de Inglaterra e Irlanda a las que volaba hasta el pasado fin de semana y desde hace 30 años. Monarch llegó a acumular pérdidas de 300 millones de euros en 2016 y su situación era insostenible, por lo que suspendió operaciones provocando la repatriación de más de cien mil británicos tirados en diferentes destinos turísticos del mundo, entre ellos la Costa Blanca y, por supuesto, Benidorm. Monarch ofrecía vuelos desde Londres (Luton y Gatwick), Manchester, Dublín y Birmingham a Menorca, Mallorca, Ibiza, Alicante, Barcelona, Murcia, Málaga, Gibraltar, Faro, Reus, las Islas Canarias, Chipre, Grecia y sus islas (Santorini, Creta) con vuelos chárter y regulares.

La Costa Blanca, Menorca, Málaga y Mallorca eran sus principales destinos desde que a principios de los años 80 comenzará su expansión por el Mediterráneo y, por supuesto, Benidorm se convirtió en uno de los destinos estrellas para sus pasajeros. Tras su cese de operaciones se abre un periodo de incertidumbre debido a que su cierre coincide con el comienzo de la temporada baja en el sector aeronáutico y la reducción de las compañías cubren los destinos de Monarch, como Easyjet, Jet2.com, Tuifly, Brittish y Ryanair. No obstante, fuentes del sector turístico de la Costa Blanca y del aeropuerto han reaccionado con cautela, ya que piensan los enlaces de Monarch son atractivos y rentables para el resto de la compañías que operan en El Altet.

En este sentido, la aerolínea Easyjet se ha puesto ya en contacto con tripulaciones, pilotos y personal de oficina de la fallida Monarch Airlines para que se sumen a su proceso de selección de empleados, que incluye para estos días una oferta con cientos de puestos en Reino Unido. Easyjet ha contactado ahora con su personal para informarles de las ofertas de empleo abiertas, entre las que figuran cien puestos de tripulantes de cabina en el aeropuerto de Luton y 400 en el de Gatwick. También tiene previsto contratar directamente a un número indeterminado de pilotos. La oferta implica que «cientos de empleados de Monarch podrían encontrar empleo».

Retorno

Por otro lado, un total de 34.617 pasajeros afectados por el cese de operaciones de Monarch, del total de 110.000 personas que se han quedado en tierra, han regresado ya al Reino Unido en 173 vuelos durante los tres primeros días de la operación de repatriación sin precedentes lanzada por el Gobierno británico y puesta en marcha por la Autoridad de la Aviación Civil británica, que finalizará mañana domingo.

En concreto, los días 1 y 2 de octubre se operaron 119 vuelos, en los que 23.330 clientes volaron al Reino Unido. El miércoles fueron 54 los vuelos fletados, en los que viajaron 11.287 pasajeros de la aerolínea y para ayer había 58 vuelos previstos, en los que volvieron otros 10.700 clientes, de los que 6.885 volarán desde España, parte desde el aeropuerto de Alicante-Elche.

La autoridad aeronáutica británica asegura que «trabaja sin descanso» junto con el Gobierno británico para completar la operación y reemplazar los vuelos de Monarch tras su quiebra, con once días por delante y unos 75.392 pasajeros que todavía tienen que regresar al Reino Unido.

«Al igual que le ocurre a cualquier otra aerolínea, algunos de nuestros aviones han sufrido algunos retrasos, ya sea por causas técnicas o por malas condiciones climatológicas, y esto ha llevado a algunos pasajeros a sentirse frustrados. Lamentamos enormemente estos retrasos y pedimos disculpas», afirmó ayer la presidenta del regulador británico, Deirdre Hutton. Hutton explicó que «han contactado con más de 2.200 hoteles y alojamientos para darles una garantía económica y asegurar que los clientes cubiertos por la certificación ATOL pueden seguir disfrutando de sus vacaciones sin contratiempos».