El mundo de las fiestas, área que dirige el alcalde, se mostró cautelosa con su citación. El presidente de las Hogueras, Manuel Jiménez, dijo que no se iba «a mojar» porque «en la Fiesta hay gente que opina de todo». El presidente de la Semana Santa, Alberto Payá, apuesta por esperar a que el juez le tome declaración «y, si sigue imputado, deberá cumplir lo que siempre ha pregonado si es un hombre de palabra». Cree que es negativo para Alicante que en poco más de dos años el alcalde esté imputado, «mucha regeneración no ha habido». Por su parte, el presidente de la Federación Alicantina de Moros y Cristianos, Emilio Carretón, señaló que primero hay que demostrar que es culpable. «Más que su imputación, a la ciudad le perjudica la división que hay en el seno del tripartito».