No es una simple cuestión burocrática. Los notables retrasos que acumula la Concejalía de Urbanismo a la hora de conceder licencias de obra también tienen un importante impacto en la actividad económica de la ciudad, que no está aprovechando como podría la intensidad de la recuperación económica y, en particular, la del sector de la construcción. Al menos así lo denuncian desde la Asociación Provincial de Promotores (Provia) que, por primera vez, se atreve a poner cifras a las consecuencias del atasco que sufre el departamento dirigido por Miguel Ángel Pavón.

En concreto, según los empresarios, los expedientes en los que Urbanismo ya ha superado el plazo máximo de dos meses que marca la legislación para conceder una licencia suman ya más de un millar de viviendas, lo que supone la paralización de una inversión aproximada en la ciudad de más de 315 millones de euros. Una cantidad más que notable y que supondría un buen revulsivo para la economía local. Pero es más, traducidos a empleo, esa inyección supondría la creación de más de 2.400 empleos en Alicante, según Provia, en un momento en que las tasas de desempleo siguen muy elevadas.

«Nosotros no vamos a entrar en si el Alcalde debe cesar o no al concejal, eso es una cuestión política. Lo que queremos es que el problema se solucione para que podamos trabajar», aseguró ayer a este diario el presidente de los promotores alicantinos, Antonio Fernández. «Realmente no sabemos si es una cuestión de falta de personal o de mala gestión, no podemos opinar, pero no podemos seguir así», insistió Fernández.

Imposible planificar el trabajo

El presidente de Provia denunció que, con la situación actual, «resulta imposible planificar nada. No puedes acordar las entregas de los proveedores, no sabes cuándo tienes que contratar a la gente, ni siquiera puedes empezar a vender porque no le puedes dar ningún plazo a los clientes», se lamentó el promotor quien, eso sí, reconoce que los retrasos no son exclusivos del Ayuntamiento de Alicante y que muchos municipios también acumulan demoras en sus trámites urbanísticos.

Mucho más duro se mostró el presidente de la patronal provincial Coepa, Francisco Gómez. «Necesitamos un político que tome decisiones y realice una gestión ordenada. Políticos que funcionen. Si no, habrá que cambiarlos», aseguró el también presidente de la Asociación de la Empresa Familiar, quien destacó el daño que la demora en la concesión de licencias por parte del Ayuntamiento está haciendo al sector de la construcción.

«Están tardando un año y pico en conceder licencias. Se trata de un acto reglado que no puede tardar más de tres meses», dijo refiriéndose a la lenta tramitación por parte de la Concejalía de Urbanismo. «Así no vamos a ninguna parte. Pavón no lo está haciendo adecuadamente. El daño al sector de la construcción es exagerado», aseguró Gómez, que puso como ejemplo el caso concreto de una licencia de rehabilitación que se solicitó hace un año y aún no se ha resuelto. «Para las de obra mayor aún es peor».

En la misma línea, el representante de los empresarios insistió en que Alicante necesita políticos y personas que gestionen de una forma adecuada y con unos tiempos racionales. «Todo el sector está sufriendo las consecuencias de la gestión paralizada del área de Urbanismo, con Pavón al frente. No hay licencias, se pierde un tiempo insoportable. No estamos nada de acuerdo en la gestión de este señor. Una licencia de obra en tiempos lo marca todo para realizar cualquier trámite».

Indignación en Cepyme

Estos argumentos son también los de Cepyme, la Confederación Empresarial de la Pequeña y Mediana Empresa de Alicante. Su presidente, Cristóbal Navarro, está indignado con la «celeridad tremenda» del área de Urbanismo para deshacer, dijo en referencia a cierres como el del complejo Marmarela y la consiguiente destrucción de puestos de trabajo, y que en cambio «no haya prisa» para permitir actividades.

«Los empresarios tenemos que rebelarnos contra esto. Lo dicen nuestros asociados, que la situación de Urbanismo es absolutamente inadmisible. Hay infinidad de quejas desde el ámbito del urbanismo y de otras actividades empresariales porque -Pavón- no contesta. No es que se retrase en las licencias mientras resuelve es que nos da la sensación de que no resuelve nada. Exigimos que se le dé una solución», apuntó sobre un posible relevo en el área.

Afirma Navarro que en el ámbito económico y empresarial el sentimiento general es de que la ciudad está «absolutamente paralizada y hay que solventar esto de alguna manera». También se refirió al Catálogo de Protecciones, que el vicealcalde quería aprobar. «Avisamos de injerencias en el territorio y de la gran cantidad de dinero que esto podía costar al Ayuntamiento. Morirá por inacción porque no se atreven a sacarlo, lo que nos da la razón».

El hecho de que empresas que querían abrir hoteles se marchen de Alicante tras más de nueve meses sin respuesta a la petición de licencias es otro ejemplo que puso el presidente de Cepyme sobre la paralización de Urbanismo.