Último capítulo en el largo serial de desencuentros que la cuestión de la limpieza ha provocado entre el alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, y su vicealcalde, Miguel Ángel Pavón (Guanyar), quien desde hace dos semanas también es el concejal de esta área municipal. Ayer, Pavón insistió una vez más en que «en la concejalía de Limpieza no consta información alguna relativa a los requerimientos que recientemente hemos remitido a UTE Alicante [la concesionaria del servicio], por lo que esperamos que en breve la empresa acceda a lo requerido para que el Ayuntamiento pueda fiscalizar correctamente el servicio de limpieza y residuos de la ciudad».

Pavón respondía así a lo que había asegurado el viernes Echávarri, quien por el contrario declaró que esa documentación «ya obra [en poder] del Ayuntamiento» y agregó que «quizás falta un poquito de comunicación» entre Víctor Domínguez, el antecesor de Pavón, también de Guanyar, y el propio vicealcalde. Así pues, según el munícipe, Domínguez ya habría recibido esa documentación.

Por debajo de esta nueva discrepancia entre Echávarri y Pavón subyace la visión opuesta que tienen ambos sobre cómo encarar las deficiencias del servicio de la limpieza en la ciudad: mientras el PSOE, con el apoyo de Compromís, aboga por ampliar contrato con la UTE (participada por FCC, Ferrovial y Enrique Ortiz), Guanyar se niega en rotundo y cree que el Ayuntamiento debe aumentar la fiscalización sobre la empresa para que mejore sus servicios sin tocar el contrato actual.

Ahora bien, no sólo Echávarri contradice a Pavón afirmando que la UTE ya ha enviado esos papeles al edificio consistorial. Hay otras dos voces que también desautorizan al vicealcalde. La primera, la del portavoz del PP, Luis Barcala, quien, en declaraciones a la Cadena Ser, afirmó que su grupo ya dispone de esa documentación «desde hace meses».

Cuáles son los requerimientos

E incluso fuentes próximas al área municipal de Limpieza subrayan que la mayoría de los requerimientos que ahora demanda Pavón ya están también en ese departamento: es el caso del acceso al control de la flota de vehículos por GPS, cuestión que según esas fuentes el Ayuntamiento ha estado controlando durante estos dos años) y el acceso al parte diario de Mano de Obra Directa. En cuanto a la identificación de subcontratas con su nombre, servicio subcontratado y maquinaria y personal asignados, dos de estas cuatro peticiones también se hallan ya en los despachos del Consistorio.

Echávarri, conciliador

Bien es verdad que el pasado viernes, el alcalde, aún insistiendo en que esos requerimientos ya habían solicitados y obtenidos por Domínguez, intentó mostrarse después conciliador con Pavón al añadir que «de cualquier forma me parece fantástico que el nuevo concejal, en función de sus atribuciones, pida la información que tiene que pedir».

Pero también llama la atención el hecho de que en las reuniones que el munícipe ha mantenido con los trabajadores y responsables de la UTE para lograr suspender la huelga de la limpieza, el edil de Limpieza no haya sido invitado. Sí lo fue en cambio el portavoz de gobierno, Natxo Bellido, de Compromís.