El Ayuntamiento de Alicante ha hecho los deberes de cara a la próxima cesión, por parte de la Conselleria de Educación, de todos los trámites burocráticos necesarios para sacar adelante las obras necesarias para erradicar los barracones antes de 2019 y dejar los colegios en perfecto estado de revista, tal y como se comprometió el alcalde, Gabriel Echávarri.

De momento, y hasta que el Consell ponga sobre el papel el modo en que delega en los ayuntamientos la redacción y ejecución de los proyectos de obras escolares, la edil de Infraestructuras, Gloria Vara, ha presentado el detalle de las actuaciones que necesitan la práctica totalidad de los colegios públicos de la ciudad, 50 de los 54 existentes.

Entre ellos hay cinco en los que los técnicos han detectado necesidades de actuación por motivos de «seguridad o rehabilitación estructural», y que corresponde a los colegios de Prácticas-Aneja, cuyo sótano fue apuntalado hace años; El Faro, en la Playa de San Juan, con peligrosos huecos de separación entre las barandillas; el Rafael Altamira por el hundimiento del suelo del comedor; el Ramón Llull en el que se desprendió el alicatado de la cocina; y el colegio del Bacarot por la sustitución de la cubierta de amianto en el porche trasero.

«Desde la concejalía hemos punteado todos los colegios públicos de la ciudad y tras el anuncio del Consell sobre el cambio para agilizar las obras escolares, el compromiso firme expresado por el alcalde, Gabriel Echávarri, es de firmar el convenio o documento que determine la Generalitat para sacar adelante los proyectos, licitarlos y ejecutarlos», subraya la concejala Gloria Vara.

La responsable de Infraestructuras afirma la «voluntad» del equipo de gobierno municipal de ejecutar la totalidad de las carencias detectadas desde agosto de 2015, en que accedió al ayuntamiento y cifra en 4.864.646, 13 euros el importe que el Consell debería aportar a Alicante para que al termino de la legislatura actual, es decir en el plazo de dos años, «pudiéramos tener unos colegios dignos, aunque no recién construidos» porque arrastran años y años de dejadez por parte del anterior equipo de gobierno en manos del PP, aventura.

Comedores

La más costosa económicamente de todas las obras detalladas en el informe municipal al que ha tenido acceso este diario es la construcción de un gimnasio para el colegio La Albufereta.

El acondicionamiento de comedores, cocinas, gimnasios o aseos y la ampliación de espacios para los niños de Infantil afectan en alguna forma a la gran mayoría de los centros: La Almadraba, San Blas, La Florida, Azorín, Santo Domingo, Benalúa, Campoamor, Carlos Arniches, La Condomina, Costa Blanca, Emilio Varela, Enric Valor, Eusebio Sempere, Gabriel Miró, Juan Bautista Llorca, Monte Benacantil, Nuestra Señora de la Paz, El Palmeral, Pedro Duque, Rabassa, Rafael Altamira,San Francisco de Asís, San Nicolás de Bari, Santo Ángel de la Guarda, El Tossal, Virgen del Remedio, Lucentum, Los Almendros de El Rebolledo, La Cañada del Fenollar, San Fernando y Gloria Fuertes. en los dos últimos se indica que hay un informe previo de la inspección de Sanidad sobre la necesidad de sanear y reparar las cocinas.

Banderas

El informe de los técnicos municipales llega a ser tan minucioso que incluye la dotación de mástiles o banderas para varios colegios como el San Roque, Joaquín Sorolla o el Enric Valor. Otros necesitan acondicionar oficinas,vallas o muros exteriores.