Los médicos de familia de la Comunidad Valenciana amplían su cartera de servicios y en breve comenzarán a hacer ecografías en sus consultas. El objetivo es que el médico tenga una herramienta de diagnóstico más y que el paciente no tenga que esperar tanto ni visitar varias veces al especialista para que les realicen esta prueba.

En la consulta de los médicos de familia la ecografía tiene su utilidad para diagnosticar lesiones articulares de hombro y rodilla, para hacer exploraciones en la zona abdominal, del aparato urinario y de tiroides. El objetivo es detectar patologías que se aprecian de manera clara con estas pruebas, como puede ser piedras en el riñón o un tumor en la vejiga. «La ecografía es un elemento que nos permite orientar mejor nuestras intervenciones a la hora de valorar al paciente. La finalidad es mejorar el diagnóstico», señala Javier Blanquer, miembro de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria.

Blanquer insiste en que «en ningún momento se trata de suplir el papel de los médicos especialistas, ya que si el paciente lo necesita será derivado, sólo que con un diagnóstico más orientado». Del mismo modo, «si estimamos que es necesario derivar al paciente al hospital para que le hagan de nuevo una ecografía, así se hará».

Actualmente, las distintas sociedades científicas que agrupan a los médicos de familia de la Comunidad han creado un grupo de trabajo junto a la Conselleria de Sanidad para planificar la introducción progresiva de la ecografía en los centros de salud. «Sanidad está de acuerdo en todos los planteamientos que le hemos realizado y se ha comprometido a realizar un plan de formación para enseñar a los médicos y un plan de inversión para adquirir ecógrafos para los centros de salud», añade Javier Blanquer. En este sentido, Blanquer confía en que la formación de los médicos comience en breve para que de cara al año que viene ya se estén utilizando los ecógrafos en las consultas.

Por su parte, Aurelio Duque, presidente de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria cree que la incorporación de ecógrafos a las consultas de los médicos de familia contribuirá a disminuir la lista de espera que actualmente tienen los especialistas. «Si le haces una ecografía a un paciente y ves que tiene piedras en la vesícula, lo mandas directamente a cirugía y no a digestivo como hasta el momento para que le indiquen la prueba. Seleccionas mejor los recursos y acortas tiempos», explica Duque.Traumatología es, a juicio del presidente de la Svmfic, una de las especialidades más beneficiada. «Muchas veces tienes que esperar seis semanas para que vean a los pacientes. Con un ecógrafo podemos seleccionar el tipo de lesión y, si por ejemplo, observamos que hay un tendón roto, lo derivamos por vía de urgencia». Además, «hay una serie de lesiones que se diagnostican con la ecografía, como las bursitis, que las podemos manejar desde los centros de salud».

Actualmente ya hay comunidades que han introducido la ecografía en los centros de salud. Es el caso, explica Javier Blanquer, de Madrid, Andalucía, Castilla La Mancha y Castilla León, y otras que actualmente están trabajando para introducirlas, como Cataluña o Murcia.