El vicealcalde de Alicante y concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, anunció ayer que el Ayuntamiento también está estudiando la paralización de la carga y descarga de graneles en el Puerto. Pavón, de hecho, firmó este mismo viernes tres decretos en los que insta a las tres empresas que operan en la Autoridad Portuaria a pedir en el plazo máximo de un mes la solicitud de licencia ambiental para poder continuar con su actividad. En caso de no hacerlo, el Consistorio ordenará la suspensión temporal de la carga y descarga de graneles.

Pavón dio a conocer ayer la noticia, justo el mismo día en que este diario adelantó que la Conselleria de Medio Ambiente ha propuesto una sanción de 120.000 euros al Puerto al entender que incumple las medidas contra la polución por no haber acreditado la instalación de tres estaciones para medir la calidad del aire. La Generalitat, incluso, advirtió de que acordará una «paralización temporal total» si la Autoridad Portuaria no acredita en 15 días que está adoptando medidas correctoras.

Pues bien, Pavón aplaudió ayer esa decisión y adelantó que los técnicos municipales del Servicio de Disciplina Urbanística han rechazado en sendos informes las alegaciones que presentaron las empresas al entender que el instrumento de intervención ambiental aplicable a la actividad es el de licencia ambiental y no el de declaración responsable. De ahí que la Concejalía les reclame ahora que presenten en el plazo de un mes la correspondiente solicitud de licencia ambiental. «De lo contrario cabría plantear, como ya ha hecho la Conselleria y si persiste el incumplimiento de las condiciones de la autorización de emisiones a la atmósfera, la suspensión temporal de la actividad», advierten desde su departamento.

Posible solución

Pavón, con todo, ofreció una solución para minimizar las molestias que sufren los vecinos de las zonas próximas por la carga y descarga de graneles. «Entendemos que la solución definitiva pasa por que Conselleria imponga, sí o sí, las naves cerradas en depresión, algo que lamentablemente no recoge la autorización autonómica al abrir la puerta a que esas naves finalmente no se construyan si las medidas correctoras provisionales reducen los niveles de contaminación por debajo de determinados umbrales», concluyó el vicealcalde de Alicante.