Cuando se inició la obra del carril bici en el Acceso Sur de Alicante, dijo el Ayuntamiento que unos 200 ciclistas usarían al día la senda ciclista. Sólo unos pocos la estrenaron ayer pero lo cierto es que los dos primeros kilómetros de carril bici que el tripartito realiza en la ciudad están por fin terminados, tras más de cinco meses de obras a causa de un modificado para introducir un giro a la factoría de aluminio Aludium y por demandas de seguridad de Adif con el muro del tren que han encarecido la obra más allá del millón de euros.

Los ciclistas que circularon ayer por la avenida de Elche usaron ya el carril tras las prisas de última hora para que estuviera abierto el primer fin de semana de agosto, en el que se espera mucho movimiento. Conviven ya, en principio sin peligro -un coche se empotró el miércoles sobre el carril- con el resto de conductores, que por fin respiran tras las retenciones de meses por las obras, sufridas incluso en julio.

Desde el área de Movilidad que dirige el edil Fernando Marcos destacan que se ha conseguido convertir la nueva avenida de Elche en una vía urbana limitada a 50 Km/h, calmar el tráfico e integrar al peatón con las aceras y los nuevos itinerarios peatonales, que también los hay, y se logra ofrecer nuevos modos de transporte alternativos al vehículo privado, con el carril bici, pintado de gris y de rosa exclusivamente en los cruces. También se ha reestructurado el cruce de la avenida de Elche con Joaquín Blume ante la previsión de aumento de tráfico con la futura conexión con la Vía Parque en construcción en el tramo Lorenzo Carbonell-El Palmeral, que dará acceso directo a Alicante en dirección noroeste.