El mes de julio ha tenido una temperatura media de 24,6 grados, que supone 0,6 grados más de lo habitual, y la precipitación acumulada ha sido del 33 % inferior al promedio normal en la Comunitat Valenciana.

La precipitación acumulada ha sido de 7,7 l/m2, que es un tercio más baja que la del promedio climático del periodo 1981-2010 (11,3 l/m2), según ha informado Aemet.

Según la evolución diaria de la temperatura, el mes empezó relativamente fresco, a lo que siguió un notable ascenso térmico a partir del día 6.

Durante el periodo entre el día 6 y el 16 las temperaturas fueron muy altas en el interior, sobre todo en el interior de Valencia y Alicante, donde se llegaron a superar los 40ºC en muchas localidades: Jalance 42.8ºC el día 12; Alcoi 42.2ºC el día 12; y Utiel 42.0ºC el día 13.

Mientras, en las localidades costeras, el típico régimen de brisas ha refrescado algo el territorio en la franja litoral y prelitoral,donde las anomalías de temperatura han sido más bajas que en el interior.

Tras una normalización de las temperaturas entre los días 17 y 26, los últimos días del mes nuevamente se superaron los 40ºC en estaciones de la provincia de Valencia: Xàtiva, 41.4ºC el día 27; Jalance, 41.2ºC el día 29; y Carcaixent, 40.4ºC el día 27.

El mes ha sido anormalmente más cálido en el interior y prelitoral que en el litoral, donde la estabilidad ha favorecido regímenes de brisas bien establecidos que han suavizado las temperaturas a partir de mediodía.

En cuanto a las lluvias, el mes ha sido pluviométricamente normal y, según Aemet, aunque parezca contradictorio, la precipitación ha sido un tercio inferior a la media.

Esto sucede de forma relativamente frecuente en los meses secos de verano, y se explica porque son dos parámetros estadísticos distintos ya que mientras la anomalía de precipitación (desviación frente a la media climática) tiene como referencia la media aritmética de la serie de referencia 1981-2010 (11.3 l/m2), el carácter pluviométrico tiene como referencia la mediana de la serie de referencia (8.7 l/m2).

En cualquier caso, julio es, con diferencia, el mes más seco del año en casi el cien por cien del territorio de la Comunitat Valenciana, y tanto el déficit como el superávit de precipitación que se puedan registrar en este mes tiene muy poco peso en el balance anual.

Como suele ser habitual en julio, las precipitaciones que se registraron estuvieron acompañadas de tormenta. Las más significativas se registraron los días 1, 7, 21 y 23.

Las tormentas de julio suelen caracterizarse por su distribución irregular, presentan mayor adversidad en las comarcas del interior norte y en muchas ocasiones van acompañadas de granizo.

Así ocurrió en las tormentas que afectaron a la provincia de Castellón en la tarde del día 23 que, aunque fueron de corta duración, estuvieron acompañadas de granizo que llegó a superar los 4 cm de diámetro en localidades como Cirat o Morella.

Los valores más altos de precipitación en el mes de julio se han registrado en el interior norte de Castellón.

En una cuarta parte del territorio, situado en zonas de los dos tercios sur de la provincia de Castellón y del interior de Valencia, el mes ha sido seco o muy seco, mientras que en el 40 % del territorio el mes fue húmedo o muy húmedo, situado en el tercio norte de Castellón y en gran parte de la provincia de Alicante; en el 35 % restante, julio fue pluviométricamente normal.

Con lo poco que ha llovido en Alicante en julio, resulta paradójico que el mes pueda calificarse como húmedo o muy húmedo. Y es que a pesar de lo poco que ha llovido, lo normal es que aún llueva menos en este mes en la provincia de Alicante. Por ejemplo, en la ciudad de Alicante, se han acumulado en el mes de julio 8.6 l/m2.

Julio de 2017 ha sido el más húmedo de los últimos 20 años en la ciudad de Alicante, desde julio de 1997, mes en el que se registraron 14.5 l/m2.