Uno de los principales criterios a la hora de elegir qué tipo de estudios cursar, son sus salidas laborales. Con frecuencia, sólo se piensa en los trabajos más habituales relacionados con los diferentes ciclos o grado. Sin embargo, hay todo un mundo de actividades laborales que puedan realizar sobre todo los jóvenes cuando acaban sus estudios o mientras los cursan. El servicio de remesa de alojamiento para estudiantes, Uniplaces.e, ha recopilado algunos empleos a tener en cuenta cuenta al iniciarse en el mercado laboral. Todos los que proponen son originales, curiosos y en muchos casos de lo más chocantes.

Para los estudiantes de Ingeniería Civil se propone la creación de maquetas Lego. De hecho, los parques temáticos de Lego necesitan ingenieros que participen en el diseño, instalación y mantenimiento de sus maquetas, por lo que no es descartable intentar hacer prácticas en la compañía y ganar hasta 30.000 euros al año.

Los estudiantes de Ingeniería Informática puede convertirse en hacker. Dada la obsesión de las empresas por la seguridad informática este es uno de los trabajos más demandados y cuyo sueldo, según Uniplaces, ronda los 90.000 euros anuales.

A los estudiantes de veterinaria, esta plataforma les aconseja plantearse ser entrenador de perros, uno de los sectores relacionados con los animales con mayor demanda.

Convertirse en degustador de chocolate es una alternativa laboral para los estudiantes de ingeniería en alimentos. Igual que hay catadores de vino y de aceite, las empresas chocolateras necesitan expertos para probar sus productos. Algo más que un trabajo si además te gusta el chocolate.

Los estudiantes de Cine y Comunicación Audiovisual pueden optar por ser categorizadores de series lo que supone ver series y películas a todas horas. No está mal como trabajo. Como tampoco lo está ser «viajero de National Geographic» para los estudiantes de Fotografía y pasarse la vida viajando con la cámara al cuello.

Todo es cuestión de imaginación y de no limitarse a lo convencional.