La ofensiva del Ayuntamiento de Alicante para reactivar las obras paralizadas ha surtido efecto en el caso de un edificio que se paralizó hace años en pleno Casco Antiguo, ente las calles Tarifa y Virgen de Belén. La estructura de este edificio de viviendas se quedó a medio construir, generando numerosas quejas ciudadanas. La concejala de Urbanismo, Marta García-Romeu, explica que comenzaron a tramitar la caducidad de la licencia y poco después recibieron la notificación de que el promotor había traspasado el proyecto a un segundo que, según la edil, tiene intención de reanudar el proyecto de manera inmediata. De ahí que desde Urbanismo hayan decidido mantener viva la licencia a la espera de que se retomen los trabajos.
Se trata de un edificio de viviendas ubicado en pleno Casco Antiguo, con fachada a varias calles. El estado de la obra generó numerosas quejas vecinales, tanto por los residuos en su interior como por el riesgo de desplome de una gran grúa que fue retirada hace unos meses y por el deficiente vallado, que propició que grupos de indigentes se refugiaran allí y que uno de ellos falleciera al caer por un hueco de la estructura en el año 2011.
