La entrada de una bolsa de aire frío en las capas altas de la atmósfera va a provocar inestabilidad mañana jueves y el viernes en toda la provincia con posibilidad de lluvias pero que serán débiles y en forma de barro. Seguirá el calor y la sensación de bochorno porque, por otro lado, continúa la inyección del aire del Sahara. Anoche, en la franja litoral no se bajó de los 25 grados en ciudades como Alicante con puntas de humedad del 70% por lo que la sensación térmica fue de 30 grados en toda la costa.

Desde 1980 el número de noches tropicales en Alicante ha pasado de apenas ocho o diez, a más de 30 en la actualidad en el trimestre comprendido entre julio y septiembre. Las noches tropicales son uno de los indicadores de cambio climático que se están investigando. Esto se debe, en gran parte, al calentamiento del Mediterráneo desde 1990. Este junio alcanza los 23º, cifra que corresponde a julio y además se mantiene más tiempo en verano con récords de 27 grados.

La provincia cerró uno muy cálido, el tercero más caluroso desde 1950 y con lluvias ligeramente inferiores al promedio normal y con una temperatura media de 23,3 grados centígrados, 2,4 grados por encima de la climatología de referencia (20.9ºC). Se trata del tercer junio más cálido desde 1950, tras 2003 y 2012. Además, la precipitación acumulada fue de 22,8 litros por metros cuadrados, un 9 por ciento menos respecto al periodo 1981-2010 (25,1 l/m2), según los datos de la Agencia Estatal de Metereología.