Profesores interinos afectados por la exigencia de la capacitación del valenciano para el curso próximo cuestionan a la Junta Qualificadora de los exámenes en esta lengua. En un comunicado sostienen que los cursos ofrecidos para sacar la capacitación «no han estado a la altura de los requisitos exigidos, o bien la Junta se está excediendo en los criterios de evaluación porque los resultados han sido desastrosos y sabemos lo que nos jugamos».

Afirman que «la actuación de la Junta es cuestionable, al igual que a los docentes se nos cuestiona cuando el número de suspensos en un grupo es elevado», y solicitan una «auditoria de los niveles y de los resultados de las pruebas».

Como solución a su situación, que les aboca al paro, piden a Educación que les deje trabajar en zonas castellanohablantes como a los funcionarios docentes sin el requisito hasta tenerlo, y que puntúe como mérito pero no excluya.