El Ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha anunciado en una visita a las obras del Corredor Mediterráneo que su departamento ha decidido que el tramo València-Castellón del AVE se transforme finalmente a una plataforma de doble ancho de vía internacional (pasajeros y mercancías), lo que permitirá reducir en 90 minutos el tiempo de viaje en tren entre Alicante y Barcelona a partir de 2021. De las cuatro horas y media actuales se pasará a un viaje de 3 horas, ya que los trenes podrán circular a más de 300 kilómetros hora. Las obras arrancarán en 2019 con un inversión de 1.170 millones de euros. Tiene una longitud aproximada de 62 kilóemetros y permitirá a los servicios comerciales de viajeros circular a una velocidad máxima de 350 km/h. De acuerdo con la planificación actual del Ministerio de Fomento. La obra se licitará en 2019.

Esta actuación, junto a la construcción del túnel pasante en València ya aprobado por la Sociedad de integración de la Alta Velocidad en Valècia, logrará reducir el tiempo de viaje entre Barcelona y Valencia a 2 horas, desde Barcelona hasta Alicante a 3 horas y hasta Castellón a 1 hora y 35 minutos, permitiendo así servicios competitivos para los trenes de mercancías, más eficientes y ágiles, al incorporar un nuevo trazado.

Esta reducción de tiempo se producirá también gracias a las propuestas de inversión ya programadas por el Ministerio de Fomento para incorporar el ancho UIC en otros tramos: la variante de Vandellós-Tarragona, el cambio de ancho Castellón-Vinarós y las actuaciones entre València-Xátiva-La Encina.

Una vez que entre en servicio la vía con tercer carril entre València y Castellón que en estos momentos se encuentra en pruebas, previsiblemente en el cuarto trimestre de este 2017, Adif empezará con las obras en la otra vía de este mismo tramo para incorporar también el tercer carril.

Ante un potencial incremento del tráfico de mercancías y viajeros en este tramo, se ha previsto abordar la construcción de una nueva plataforma y el marco presupuestario de los próximos ejercicios para esta infraestructura.

Por lo que respecta al tráfico de mercancías, el Plan Estratégico que el Ministerio de Fomento quiere llevar a cabo incluye la conexión de todos los puertos del Corredor Mediterráneo a la red de ancho estándar, con soluciones acordes con las necesidades de cada instalación, como la implantación de tercer carril.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) inició, por su parte, a mediados de 2016 los trámites previos a la ocupación de terrenos que servirán para acopio de los materiales necesarios para el montaje de vía en el trayecto Alcudia de Crespins-Nudo de La Encina, de 39 kilómetros, dentro de las obras del Corredor Mediterráneo entre Alicante y Villena de ancho ibérico.

El tramo se inserta en la Línea de Alta Velocidad Madrid-Castilla La Mancha-Comunidad Valenciana-Región de Murcia, así como en el Corredor Mediterráneo. Los terrenos que se verán afectados se encuentran en los términos municipales de Moixent y Font de la Figuera, en la provincia de Valencia. En ellos se situará la base de acopio de los materiales que compondrán el tendido férreo que conectará con La Encina, en Villena.

Las obras en el trayecto Nudo de La Encina-Xàtiva, en el que se incluye el tramo Alcudia de Crespins-Nudo de La Encina, consisten en la construcción de una plataforma ferroviaria -ya finalizada- para albergar un corredor de ancho ibérico que conecte ambas localidades.

Una vez puesta en servicio esta vía de ancho ibérico, se desviará todo el tráfico actual (viajeros y mercancías) entre Alicante y Valencia, tras pasar La Encina, por la misma y se iniciarán los trabajos de la segunda fase, que consisten en la adecuación de la actual plataforma para el tráfico de viajeros de alta velocidad en doble vía de ancho internacional, lo que posibilitará la conexión de Valencia con Alicante, Elche, Orihuela, Murcia y Albacete en alta velocidad.

Las obras en la línea Xàtiva-Nudo de La Encina podrán ser cofinanciadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional. El Ministerio de Fomento tiene previsto que el viaje en entre Alicante y Valencia se quede en los 55 minutos en 2018 y entre quince y veinte minutos más con Elche y Orihuela.

Mientras los plazos para que las cuatro ciudades más importante y densamente pobladas van recuperando el ritmo, aunque ninguna fecha se pueda dar por oficial y segura, sigue a cámara lenta la ejecución del tramo en alta velocidad para la carga. El Puerto ha logrado en dos años inaugurar dos líneas ferroviarias con Madrid pero sigue sin enlace con el Corredor Mediterráneo.