El secreto, que sea crujiente, que se rompa al comerla. Esta es la clave de una buena coca amb tonyina, la excelencia gastronómica de las Hogueras que no faltará en los racós en las próximas noches de plantà. Lo dice María del Mar Marín, que regenta junto a sus hermanas Aurelia y Luisa el horno «El Melsa» del barrio de San Blas, acreedor este año con su coca del prestigioso premio del Gremio de Panadería y Pastelería de l'Alacantí, cuyo jurado la eligió entre las treinta participantes.

Contenta con la buena noticia, decía María del Mar que «la tonyina que hemos mandado nos ha quedado exactamente igual que las que salen para vender. Llevan el mismo sofrito, la misma cantidad y cocido igual. Eso sí, ha salido preciosa pero de sabor es como las que vendemos en el horno».

Esta panadería, muy conocida en el barrio de San Blas, la fundó en los años 50 del pasado siglo Juan Marín, padre de las tres hermanas, a quien todo el mundo conocía por «El Melsa», nombre que conserva la panadería. Ellas la regentan desde hace 25 años en la calle Juan Ortega 47.

El horno elaborará para Hogueras unas 700 cocas amb tonyina, de venta directa en el despacho, más si reciben algún encargo de hoguera o barraca, siguiendo la receta de su padre. Es la siguiente: la masa lleva aceite de oliva, agua, anís seco, sal y harina, mientras el relleno contiene cebolla frita, atún de tonyina, perejil y piñones. «Y hacemos todos los viernes del año. Todo casero, lo hacemos todo nosotras, con mucha ilusión. Conforme están las cosas y con tanto congelado, lo tradicional se sabe valorar», explica María del Mar.

Además del premio por su coca amb tonyina, «El Melsa» ha ganado con anterioridad los concursos del Gremio de Panadería de roscón de Reyes y mona. El segundo premio de tonyina ha sido para la panadería San Gabriel, y el tercero para Ferri Santamaría de Villafranqueza. Del cuarto al sexto Hermanos Guardiola, Panadería Moreno y Sánchez Artesanos.