Un colchón abandonado junto a un contenedor en la calle San Agustín, en pleno Casco Antiguo de Alicante, acabó ardiendo durante la madrugada del sábado. Es una zona muy concurrida los fines de semana, sobre todo por jóvenes que acuden a la zona a los pubs y bares de copas.
Según explican los vecinos del centro histórico, el fuego intencionado se produjo pasadas las dos de la madrugada y obligó a la intervención de los Bomberos. Los residentes del inmueble, en el número 13 de San Agustín, se quejan de que los fines de semana "es un desmadre" porque hay botellón y muchos jóvenes "sin control", dice Daniel Guerrero, quien esta mañana estaba limpiando los restos del incendio en la fachada de su casa.
Pedro Picazo, hostelero de la zona, lamenta que la situación los fines de semana es de "alta tensión" y a pesar de que hay control policial no se logra controlar lo incontrolable cuando cientos de jóvenes se concentran en una misma zona para beber alcohol.
Los vecinos del Casco Antiguo ya han realizado actos de protesta por lo que consideran una situación que se ha ido de las manos. A final de mayo saliero a la calle con una cacerolada como llamada de atención. Exigen que se tomen medidas para acabar con la concentración de jóvenes y sobre todo "con los gritos, las meadas y el gamberrismo", critica el hostelero.
