Con talleres prácticos a cargo de científicos, sanitarios y otros expertos. De este modo se intenta que escolares alicantinos aprendan a manejar de forma segura los petardos en en una ciudad en la que los niños juegan con pirotecnia desde muy pequeños sobre todo durante las fiestas del fuego.
Varias decenas de escolares de los colegios Inmaculada del Pla y San Juan De la Cruz participan en Las Cigarreras en los talleres organizados por las Concejalías de Seguridad y de Consumo a las puertas de las Hogueras. Una instrucción que el Ayuntamiento puso en marcha con charlas en colegios a raíz del fallecimiento de un niño en un accidente con un petardo en un racó y que ahora se vuelve más práctica.
No obstante, agentes de la Policía Local les han dado nociones previas como no guardar material pirotécnico en los bolsillos, no manipular los petardos, encenderlos siempre en el suelo, no lanzarlos contra personas, animales o bienes, mantenerlos alejados de la cara y cómo actuar en caso de quemaduras. La práctica totalidad de los niños han reconocido que tiran petardos y no precisamente siguiendo estas normas. La Policía les ha instado a no comprar nunca los petardos en puestos ambulantes ya que el calor los puede deteriorar y tienen riesgo de explosión.
En los talleres han aprendido cómo funciona la pirotecnia con experimentos con agua y aspirinas dentro de un tubo hasta que ha explotado. También han participado en un taller sensitivo para detectar de donde viene el ruido de un petardo con globos situados en distintos sitios. A ciegas los niños han ido detectando donde estaban dando paso a una traca con globos. Los expertos les han dado nociones sobre materiales inflamables y cuál es la ropa adecuada para tirarlos, algo que les han mostrado tirando petardos sobre algunos textiles para comprobar el efecto que producen.
La instrucción ha finalizado con un taller sobre quemaduras a cargo de Cruz Roja y otro de los policías con consejos de cómo se tiran y no se tira la pólvora con una simulación real a cargo de los agentes. Después les dejarán tirar petardos para comprobar lo que han aprendido.
