El camarín de la Santa Faz tiene desde hoy nuevo cristal blindado. Así lo ha comunicado el Obispado de Orihuela-Alicante, que destaca que se trata también de una protección blindada pero con una resistencia mayor contra posibles actos vandálicos y sensores más sensibles. Esta decisión se ha tomado tras el ataque del pasado fin de semana al templo, y la detención de una menor de 16 años por un delito contra los sentimientos religiosos ya que está acusada de invertir siete cruces y de pintar "666" en la hornacina donde se protege la Reliquia.

El Obispado ha decidido cambiar el cristal pese considerar que el que había antes ha funcionado y evitado que se pudiera producir algún daño a la Santa Faz.

En un comunicado, indican que ayer lunes se reunieron en el monasterio con la comunidad de las hermanas Clarisas, el ecónomo diocesano, el deán del Cabildo de la Concatedral de San Nicolás y los técnicos responsables de la empresa de seguridad.

"Se ha revisado el estado del sistema de vigilancia y seguridad que protege la Santa Reliquia. Se ha verificado, por parte de la empresa de seguridad, que tanto los sensores como las cámaras de vigilancia se encuentran en perfecto estado".

Añaden también que los videos grabados han sido entregados a la policía científica para que siga adelante su investigación, y que en todo momento se ha contado con la disponibilidad y apoyo del Ayuntamiento de Alicante, que "como copatrono de la Santa Reliquia", ha permanecido informado sobre el tema.