La Generalitat y el Ministerio de Fomento llegaron ayer en Madrid a un principio de acuerdo para salvar de la bancarrota la sociedad Avant y continuar así la adecuación de los accesos ferroviarios a Alicante, que estaban bloqueados desde la llegada del AVE hace tres años. El pacto alcanzado por la consellera de Vertebración del Territorio, María José Salvador, y el presidente de Adif contempla que Fomento se haga cargo del pago del crédito de 60 millones que pidió Avant y vence este mismo mes, y desde entonces empezar desde cero para seguir con el desarrollo del proyecto urbanístico: el parque central, el soterramiento definitivo y la construcción de la estación intermodal, aunque las tres actuaciones siguen sin plazos.

El acuerdo llega «in extremis» y cuando ya parecía que Avant estaba condenada al cierre debido a la deuda acumulada. Generalitat y Ayuntamiento de Alicante seguirán en Avant.

Después de realizar diferentes actuaciones en la zona, la sociedad Avant sigue siendo en la actualidad la titular de las infraestructuras ferroviarias y de la estación. Sin embargo, estas instalaciones están siendo explotadas por el Ministerio de Fomento. Ante esto, el Ayuntamiento de Alicante y la Generalitat se dirigieron en agosto de 2016 al ministerio para negociar una solución definitiva a los problemas económicos de Avant, derivados de los compromisos adquiridos con las entidades financieras.

De hecho, Avant tiene que hacer frente en pocos días a la amortización de un crédito de 60 millones de euros y no tiene fondos propios para hacerlo. En el principio de acuerdo alcanzado, a falta de diversas reuniones para cerrar algunos aspectos, se han asumido algunos planteamientos de la propuesta de la Generalitat y del Ayuntamiento, como que Fomento se haga cargo de la amortización del crédito bancario vigente, a cambio de asumir las obras ferroviarias ejecutadas por la sociedad Avant, según apuntaron ayer desde el Consell.