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La UA crea más plazas de catedrático a costa de precarizar la plantilla de profesores

La Universidad cuenta con el número más elevado en los últimos siete años de titulares de la plaza más alta

La UA crea más plazas de catedrático a costa de precarizar la plantilla de profesores

La Universidad de Alicante tiene la cifra de catedráticos más alta desde el año 2011 mientras no cesa de aumentar el número de asociados, contratados doctores e investigadores temporales, una medida que precariza la plantilla de profesores, según denuncia el sindicato STEPV-Intersindical Valenciana y rechaza de plano la propia institución académica.

El coordinador de la sección sindical, Alfonso Cueto, afirma que la figura del profesor asociado tiene cada vez más presencia en la universidad. Se trata de una persona que trabaja en una empresa o institución ajena a la institución y es contratada por su experiencia profesional (arquitectos, abogados y publicistas, entre otros).

«Al contrario de lo que pueda parecer, se trata de un trabajo que está muy mal pagado, con una horquilla entre los 250 y los 500 euros al mes, a lo que se une que hace las mismas horas que un profesor: ahí está el problema y la trampa», explica.

El dirigente sindical alerta de que la UA «abusa de su uso», al tener en 2017 casi mil profesores asociados de una plantilla total de casi 2.500 (ver cuadro adjunto). El segundo grupo más numeroso es el de titulares de universidad (545), seguido de personal contratado con cargo a proyectos de investigación (256) y catedráticos (216).

Precisamente, este último grupo crece de forma imparable año tras año desde 2011, ya que la universidad hace uso de una medida del gobierno por la que se iguala el número de promociones de catedráticos con los titulares.

Para Cueto, «al final lo que se está produciendo es una precarización de las plazas, que choca con la apuesta por una universidad pública y de calidad, esto no ayuda de ninguna manera a la calidad de la enseñanza».

El representante del STEPV pone el acento en que bajar el índice de asociados «supondría dotar de plazas de profesor, pero eso supone más dinero», al tiempo que incide en que esta figura profesional «no debería tener problemas laborales, pero los tiene y, de hecho, han empezado a surgir plataformas en la universidad para denunciar esta situación».

De los datos de los últimos siete años se desprende que el número de catedráticos es el más alto desde 2011, el número de contratados doctores se ha disparado (de 97 a 187) y el de ayudantes no deja de disminuir.

Por su parte,el vicerrector de Ordenación Académica de la UA, José Penadés, asegura que la política de contratación está «muy condicionada» por dos factores fundamentalmente: la tasa de reposición, que limita la oferta de empleo público, y la infrafinanciación por parte del Consell.

Promoción

Sobre la primera, Penadés sostiene que dicha tasa conlleva que un gran número de profesores contratados vea mermadas sus posibilidades de promoción, por lo que «esperamos que se modifique al alza».

Respecto a la segunda, «reclamamos una financiación acorde» a la institución académica.

El vicerrector, además, se muestra en contra de las aseveraciones del sindicato: «Un profesor asociado a tiempo parcial no tiene porqué considerarse una precarización».

Penadés recuerda la apuesta de la Universidad por la incorporación del talento joven, con una partida específica para jóvenes investigadores «que tiene expectativas de promoción», y pone en duda los datos del sindicato sobre la evolución del profesorado, para lo que pone como ejemplo que «en el último año informan de que hay catorce nuevos catedráticos, y eso no puede ser porque ha habido seis o siete jubilaciones».

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