Los bomberos sofocaron ayer un aparatoso y virulento incendio declarado en la octava planta de un edificio de aparcamientos entre las avenidas General Marvá y Benito Pérez Galdós de Alicante, y que afectó a seis vehículos. Las tareas fueron complejas, ya que además la falta de presión de las mangueras del complejo obligó a que los bomberos tuvieran que emplear sus propios medios en la extinción.

Los efectivos del parque de Alicante acudieron al siniestro, declarado en un vehículo estacionado en el parking de la avenida General Marvá Nº 20, que tuvo que ser desalojado de personas durante más de dos horas, sin que nadie resultara herido, según indicaron fuentes de la concejalía de Seguridad.

El aviso del fuego lo realizó a las 12.54 horas la dueña del vehículo incendiado, al empezar a arder el motor tras no lograr arrancarlo. Cuatro dotaciones completas se desplazaron al lugar de los hechos con 14 efectivos, con dos equipos combatiendo el virulento fuego del vehículo por el interior, mientras otro equipo con el vehículo escalera preventivamente se situaba en Benito Pérez Galdós por si el humo o las llamas afectaban a las viviendas del edificio, y para alertar a las personas que cerraran las ventanas, lo que también obligó a cortar esta vía más de una hora.

Una docena de bomberos trabajaron en la extinción del incendio, en el que han utilizado sus propias líneas de agua por la citada falta de presión. Fuentes de la empresa responsable del servicio de conserjería de la instalación confirmaron a este medio que las mangueras del complejo no pudieron ser empleadas pese a una revisión realizada por la firma que lleva el mantenimiento hace unas semanas, por lo que van a exigir responsabilidades a la mercantil. Los extintores sí que funcionaron pero no fueron suficientes para atajar el siniestro en un primer momento, registrándose además una explosión en el coche.

Una vez controlado el incendio del turismo, que se propagó a otros cinco vehículos más, los bomberos procedieron a realizar las tareas de ventilación, ya que las plantas novena y décima estaban muy afectadas por el humo. Los trabajos de ventilación junto con el desalojo del parking ocasionaron que se tuviera clausurado el complejo durante más de dos horas.

El fuego se declaró por una avería en el motor de un vehículo. y las tareas de extinción fueron complicadas, afectando al vehículo que quedó totalmente calcinado, y a cinco vehículos más que resultaron parcialmente afectados, y en gran medida a las instalaciones por el humo.