El cáncer, o mejor dicho las enfermedades oncológicas, revisten una complejidad tal que requieren en la lucha contra las mismas de una labor multidisciplinar, en la que intervengan especialistas de muy diversa índole y apoyados siempre de las últimas innovaciones terapéuticas.

Esta sería una de las conclusiones generales que se desprende de la charla coloquio que tuvo lugar ayer en el Club INFORMACIÓN con el título «Tengo cáncer ¿y ahora qué?» en la que intervinieron especialistas pertenecientes a la Plataforma de Oncología del Hospital Quirónsalud Torrevieja, cuyo fundador y actual director es el doctor Antonio Brugarolas, experto en oncología.

El acto, al que acudió un numerosos público interesado en el tema que se trataba, estuvo presentado por Olaya Casado, periodista de INFORMACIÓN que habló «desde la cercanía y sobre todo desde el conocimiento de causa. Tengo 33 años y he pasado dos cánceres de mama», dijo. Culminó su intervención con un mensaje optimista. «A día de hoy estoy reconstruida, he finalizado mi terapia hormonal, pero sobre todo, la idea que hoy quiero transmitirles es que: de esta enfermedad se sale y uno puede volver a ser feliz». Toda esta experiencia la plasma Olaya en su blog «Cáncer a los 30» que escribe en la web del periódico con el que pretende «ayudar a personas que se encuentran un poco perdidas en cuanto a dudas del día que surgen con el cáncer.

Cáncer y envejecimiento

La charla la inició el doctor Brugarolas con una ponencia con el título «Los porqués del cáncer». En su intervención hizo referencia al envejecimiento «un proceso en el que los cambios fisiológicos contribuyen a que se sea más susceptible a la enfermedad, aunque -añadió- el envejecimiento en sí no es una enfermedad y no debe excluir ningún enfoque de salud».

En cuanto a la relación entre cáncer y envejecimiento, señaló que el aumento del riesgo de cáncer con el envejecimiento se debe a «aumento de exposición a eventos carcinógenos y al envejecimiento somático de las células».

Hizo el doctor Brugarola una breve reseña sobre conceptos básicos de genética de la que dijo que es «solo un aspecto básico del desarrollo humano, siendo también contribuyentes relevantes de nuestra historia el conocimiento, las ciencias sociales y las humanidades».

Destacó dos aspectos, la restricción calórica y el ejercicio físico, como esenciales en la prevención del cáncer. Aunque fue al final de su intervención, y tras hablar también sobre algunos medicamentos cuya acción se ha comprobado en la prevención de algunos cánceres, cuando el doctor Brugarola expuso un decálogo para prevenir el cáncer.

Entre los cosejos incluidos enumeró los siguientes: Abstenerse del tabaco; seguir una dieta mediterránea saludable con aceite de oliva, nueces mixtas, legumbres, pescado mejor que carne roja; tomar gran cantidad de frutas y verduras; evitar el sobrepeso; consumo moderado de alcohol; limitar los derivados de la carne procesada, el ejercicio físico de tres a cinco veces por semana; protegerse de la exposición solar; vacunación VPH, VHB, y cuidados médicos regulares y revisiones de rutina (PAP, Mamografía, Colonrrectal, Pulmón...)

Oncología quirúrgica

Seguidamente tomó la palabra el doctor José Farré, responsable de del departamento de cirugía oncológica que habló del papel de la cirugía en el tratamiento del cáncer y de como ha cambiado su papel en los últimos años.

«Ya no es la cirugía sola el único tratamiento para la mayoría de las neoplasias malignas sólidas sino una combinación de cirugía y terapias multimodales (con radioterapia altamente focalizada, terapias moleculares dirigidas y polimioterapia) convirtiéndose en el estándar moderno de atención», dijo Farré.

Su exposición estuvo centrada principalmente en el tratamiento quirúrgico del cáncer de mama sobre el que se extendió y también incidió en la importancia de la técnica «one step», que en el cáncer precoz de mama, permite en un solo acto quirúrgico proceder a la extirpación, la irradiación y la reconstrucción del pecho afectado.

El doctor Farré ha señalado en diversas ocasiones respecto de su disciplina «que los cirujanos ya no trabajamos aislados, sino que debemos estar integrados en un equipo multidisciplinar, poniendo a disposición del paciente oncológico y en pro de la excelencia asistencial, un enfoque técnico, comprendiendo la biología y la historia natural de la enfermedad, así como las contribuciones hechas por otras disciplinas al tratamiento de los pacientes con cáncer. Es en este punto que el cirujano se convierte en un oncólogo quirúrgico».

Radioterapia intraoperatoria

A continuación intervino la doctora Rosa Cañón, responsable del departamento de Oncología Radioterápica de la Plataforma de Oncología de Hospital Quirónsalud Torrevieja, que explicó las ventajas que supone, respecto a la radioterapia externa, un avance presentado recientemente en el Hospital Quirónsalud Torrevieja. Se trata de la radioterapia intraoperatoria (RIO) en quirófano «que suprime o reduce las sesiones de irradiación externa». Señaló también las ventajas de la técnica «one step» que ya explicara anteriormente el doctor Farré.

Indicó que la radioterapia intraoperatoria «es una técnica de alta precisión en la que se administra una fracción única y elevada de radioterapia durante un acto quirúrgico, sobre el lecho tumoral, con la ventaja de la visualización directa del lecho a irradiar, evitando la irradiación innecesaria de los tejidos sanos circundantes».

La Radioterapia Intraoperatoria, señaló, se ha empleado en el tratamiento de diferentes tumores malignos, como el cáncer gástrico, de páncreas, de recto, de pulmón, los ginecológicos, los sarcomas retroperitoneales y de extremidad.

Según la doctora Cañón, «el principal inconveniente hasta ahora para su desarrollo ha sido, entre otros, el desplazamiento del paciente desde el quirófano al búnker de tratamiento, problema que se ha solucionado con el Mobetrón, un acelerador de electrones móvil, ubicado en quirófano, cuya tecnología permite administrar tratamiento a gran variedad de tumores y localizaciones, no solo a pacientes con cáncer de mama.

«En el tratamiento de pacientes con cáncer de mama aporta un gran beneficio en calidad de vida, pues acorta o suprime los días de irradiación externa posterior, disminuye los efectos secundarios y, en los casos de one step, permite la reconstrucción mamaria inmediata».

La ayuda emocional

Por último, intervino la doctora Nuria Javaloyes, especialista de Unidad de Psicooncología, quién habló de la gestión emocional del miedo en pacientes con cáncer y el papel que debe tener la familia.

De forma obligadamente sucinta habló del estrés y de su relación con el cáncer. «Si el estrés es puntual es bueno, pero si es crónico e intenso nos hace menos eficaces».

Habló del miedo como una de las cinco emociones básicas y de su función como protector . «Es importante graduar el miedo identificándolo, legitimándolo y reconociendo su función».

Respecto al papel de la familia del enfermo de cáncer señaló los como importantes el acompañamiento, estando disponible y preguntar; trata de entender y ponernos en su lugar; no negar ni ocultar lo que está ocurriendo; no quitar importancia al tema, siempre en su justa medida; apoyo emocional; obtener información sobre la enfermedad, ayudarle a distraerse; no presionar al enfermo para luchar y, sobre todo, que se autocuide.

Tras finalizar el acto se procedió a la celebración de un cóctel al que acudieron los asistentes a este interesante evento.