La lluvia caída desde anoche supuestamente es la causante de que varios semáforos de Alicante no funcionaran esta mañana. Algunos de ellos de mucha importancia al encontrarse en cruces de viales con doble sentido, como el de la avenida de Benito Pérez Galdós con General Marvá, o en la avenida de Dénia y de Salamanca, entre otras.
Tampoco había hasta minutos antes de las ocho de la mañana ningún agente regulando el tráfico ante la ausencia de las señales automáticas.
Los conductores tenían que pasar a ojo, con el hándicap de la poca visibilidad que hay a causa de la lluvia que esta mañana todavía sigue cayendo, aunque con menor intensidad que anoche.
La situación no es nueva y, de hecho, se produce con cierta frecuencia, sobre todo a altas horas de la madrugada o a primera hora de la mañana, y no necesariamente siempre que hay condiciones meteorológicas adversas.
La rotonda situada al final de la Gran Vía, que da acceso a la autovía, es uno de los puntos donde habitualmente suelen fallar los semáforos.
Si bien es cierto que en ausencia de semáforos prevalecen las señales fijas y las normas de circulación, la poca visibilidad de muchas de ellas, sumada a la velocidad con la que algunos vehículos circulan en determinadas vías, convierten estas situaciones en momento de alto riesgo de accidentes.
