En el término municipal ilicitano, en el aeropuerto de Alicante-Elche, se alcanzaron ayer 34,8 grados, un récord histórico en temporada de invierno. En el casco urbano de Elche los termómetros subieron hasta los 32,7 grados. En Alicante, la temperatura llegó hasta los 32,5 grados de máxima, también un hito en la capital de la provincia en la temporada invernal. El registro se quedó a una décima de alcanzar el récord de calor en un mes de marzo que está en los 32,6 grados del 25 de marzo de 1988, pero ya en primavera, según el registro que maneja el Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante. Pero sólo duró media hora porque la entrada de la brisa devolvió la temperatura máxima a los más normales 24,9 grados en apenas media hora. En Benidorm, la máxima fue de 27,5 grados.

Según la Agencia Estatal de Meteorología, ayer fue la primera vez que se superaron los 31 grados en invierno en la ciudad, y sólo en una ocasión anterior se alcanzó una cifra similar, el 2 de marzo de 1878, cuando el termómetro marcó 31 grados. La masa de aire tropical va a dar paso a un fin de semana completamente veraniego con máximas de vértigo cuando faltan todavía 10 días para que llegue la primavera. No obstante, el lunes la Agencia Estatal de Meteorología anuncia un cambio brusco con bajón térmico en torno a los 8/9 grados y riesgo de lluvia hasta el miércoles.

La entrada de un frente frío en España ha terminado desplazando hacia el Mediterráneo la masa de aire tropical responsable del aumento de las temperaturas de las últimas que dejará el pico de calor el domingo y no hoy sábado como estaba previsto, por lo que la provincia se prepara para disfrutar de un fin de semana veraniego cuando aún no ha finalizado el invierno.

Hoy se esperan máximas en torno a los 26 grados que pueden alcanzar los 29 en la franja litoral el domingo. El «bajón· térmico llegará el lunes y también hay riesgo de lluvias entre ese día y el miércoles aunque no de gran intensidad, según apunta Jorge Olcina, director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante. El motivo del descenso térmico y la lluvia es que el frente que entrará desde esta tarde por la noche por el Oeste peninsular arrastrará la masa de aire tropical que tenemos sobre la península Ibérica estos días, hacia el Mediterráneo.

«Y justo en estas circunstancias el pico de aire cálido lo tendremos sobre el litoral mediterráneo el domingo y no el sábado como estaba previsto a comienzos de semana. Además, este calor va a ser algo muy momentáneo. El lunes cambio importante del tiempo» alertó ayer el climatólogo Jorge Olcina. Las temperaturas caerán entre 8 y 10 grados respecto al domingo y el tiempo se tornará en desapacible con lluvias generalizadas pero no fuertes, por lo que el campo apenas lo notará este vez.