«Hay suficiente jurisprudencia asentada desde el momento en que disminuyeron los Bachilleratos, al pasar de los cuatro años de BUP y COU a tres y dos años según comunidades. Los contenciosos de los tribunales de Justicia primero, y el Supremo después ha dictado más de una decena de sentencias en las que no se hace distinción en el régimen de conciertos de la enseñanza obligatoria y la postobligatoria».

Jesús Muñoz de Priego, abogado del despacho Muñoz de Priego y Pérez que asesora jurídicamente a las Escuelas Católicas, tiraba ayer por tierra a nivel jurídico la planificación escolar del curso que viene avanzada por el conseller y que deja en el aire las plazas de 6.000 alumnos de la provincia en centros concertados de Bachillerato.

Muñoz abunda en que el conseller Marzà "ha cumplido la amenaza de implantar el principio de subsidiaridad de la enseñanza cncertada con respecto de la pública y que rechaza el Tribunal Supremo", y el nuevo decreto de conciertos lo considera "un atentado a la libertad de enseñanza".

Invitado por la Mesa por la Educación que agrupa al sector de la enseñanza concertada, este abogado disertó ayer sobre la libertad de la enseñanza en la actualidad, "una libertad amenazada", expuso.

Especializado en derecho educativo, indica que "la enseñanza concertada se fundamenta en la libertad de enseñanza, es decir, es fundamentalmente una libertad de elección y para ello se requiere de elementos entre los que elegir". En este sentido entiende que "el ideario del centro es el elemento fundamental de la libertad de enseñanza".

También destaca como "fundamentos que sustentan la enseñanza concertada, el reconocimiento jurídico en el artículo 27 de la Constitución y el pluralismo para atender obligatoriamente la pluralidad social, que se basa en el principio de igualdad y de dignidad humana".