¿Qué supone el nombramiento como «Fellow Member» de la Sociedad Internacional para la Óptica y la Fotónica (SPIE)?
Es muy estimulante que se reconozca tu trabajo por parte de una sociedad científica con miembros de 166 países. También por el hecho de que se ponga en primera línea la labor de las mujeres en un ámbito como el de la investigación que mayoritariamente ha sido de hombres y en el que no hemos sido visibles pese a nuestras contribuciones.
¿En qué consiste su trabajo en el campo de la holografía?
Las líneas de investigación que desarrollamos están relacionadas con la aplicación de la holografía a la fabricación de elementos ópticos, memorias y sensores. Nuestro equipo es interdisciplinar y está formado por físicos, químicos e ingenieros. Otras aplicaciones de la holografía son las pantallas que utilizan los pilotos de aviones o coches que necesitan recibir información superpuesta al mismo tiempo que realizan su labor y controlar así otro tipo de parámetros. Las empresas están muy interesadas en el desarrollo de estos sistemas, como ejemplo se podrían citar las Google Glass. Y en el campo clínico, se usan las técnicas holográficas para obtener imágenes del fondo de ojo, para determinar la glucosa en sangre y para detectar determinados tipos de cáncer de piel. Además, la óptica se encuentra en cualquier tecnología vinculada a la luz y aquí entrarían las fibras ópticas o las pantallas de los móviles, tablets y televisores. Es evidente que hoy en día no podríamos vivir sin la óptica. Las tecnologías basadas en la luz son una apuesta ganadora y van a revolucionar nuestra sociedad en los próximos años.
¿Hacia dónde se dirige la investigación en óptica?
En nuestro caso estamos desarrollando materiales holográficos biocompatibles. El objetivo es avanzar hacia la fotónica verde, es decir, que los materiales que se utilicen no sean tóxicos ni para el medio ambiente ni para los usuarios finales del producto. Nuestro material holográfico biocompatible está patentado tras varios años de trabajo y disponible para diversas aplicaciones. Otra línea en la que trabajamos es utilizar la holografía en almacenamiento óptico de datos para conseguir soportes más pequeños, portables y capaces de almacenar un mayor volumen de información.
¿A qué nivel se sitúa la UA en el ámbito de la óptica?
Podemos decir que estamos en primera línea de investigación nacional e internacional. Pero es fundamental disponer de más financiación para personal y becas porque los trabajos experimentales requieren de personas con dedicación exclusiva en el laboratorio.
