En la alcaldía no tienen intención alguna de echar para atrás la nueva jornada laboral aprobada para los conserjes de los colegios con jornada continua desde el pasado 1 de diciembre en el 80% de los centros públicos de la ciudad.

La Conselleria de Educación que dirige Vicente Marzà ha hecho llegar un requerimiento formal al alcalde, Gabriel Echávarri, conminándole a revocar o anular el decreto con los nuevos horarios antes de un mes, o, en su caso, llevará el asunto ante los tribunales mediante un contencioso. La respuesta de Echávarri es rotunda en el sentido de que no se va a cambiar «nada».

La alcaldía va a contestar por escrito al citado requerimiento, contrarrestando los argumentos legales de la conselleria con los alegatos jurídicos sobre la autonomía local -que ya empleó el Ayuntamiento para aprobar el nuevo horario que permite acabar la jornada de los conserjes a las 15:30 horas-, lo que obliga a cerrar los centros a las 17:00 horas al equipo directivo de cada colegio.

Responsabilidad

Ante el pulso que mantienen ambas administraciones por la jornada laboral de los conserjes escolares, el PP municipal se posiciona del lado del conseller y acusa «al tripartito de dejar abandonados los centros educativos, al exigir responsabilidades que no corresponden a los directores de los colegios». Mari Carmen de España sostiene que «la descoordinación entre ambas instituciones, local y autonómica, no deben soportarla los centros escolares ni sus propios alumnos», y culpa a la edil Espuch de no solucionarlo.