Las playas del Postiguet (zona del Cocó), Urbanova y San Juan estrenarán el próximo mes de febrero las primeras plataformas sobre la arena dedicadas al esparcimiento de las personas con discapacidad intelectual y física dentro de un proyecto con el que Ayuntamiento de Alicante pretende hacer más accesibles las playas del municipio.

La Concejalía de Playas ha obtenido una autorización temporal para este año desde la Jefatura Provincial de Costas, pero la intención es que ésta se convierta en concesión administrativa. Durante la temporada alta, las plataformas estarán atendidas por personal especializado, pero también estarán abiertas durante el resto del año para facilitar su uso por personas, cuidadores y familiares, según apuntaron ayer fuentes de la Concejalía de Turismo y Playas.

La ciudad de Alicante ofrecerá el servicio de playas accesibles, las áreas especiales durante todo el año. Servicios que están orientados a acercar las playas al colectivo de personas con algún tipo de discapacidad. Contarán con dos servicios; uno para personas con discapacidad intelectual donde se asiste, se atiende y se organizan actividades lúdico pedagógicas y otro servicio de acompañamiento y asistencia al baño para personas con diversidad funcional y movilidad reducida.

Las áreas se encuentran situadas en la playa de San Juan, Postiguet (Cocó) y en playa del Saladar-Urbanova. A partir de febrero las zonas contarán con agua y luz.

Al turismo de la Comunidad Valenciana se le presentan notables oportunidades en la captación de la demanda que genera el colectivo de personas con discapacidad. Sólo en Europa son más de 138 millones de personas, de las cuales más de una tercera parte presentan algún tipo de discapacidad y el resto son adultos mayores de 65 años. Los principales mercados emisores de turismo -Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y España- son los países con mayor población de personas con necesidades de accesibilidad.

Las personas con necesidades de accesibilidad de la Unión Europea realizan al año aproximadamente 783 millones de viajes dentro de la UE.

Por otro lado, la Agencia Valenciana ha instalado a lo largo del litoral las casetas vestidor. Las casetas son de madera, pintadas con colores vivos y el tejado a dos aguas típico de esta infraestructura. En su interior los usuarios disponen de un banco para sentarse y de perchas. El objetivo es dotar a las playas de elementos diferenciadores sobre el resto de playas del Mediterráneo.