La Universidad de Alicante (UA) contará con un edificio puntero de investigación para que se instalen empresas de base tecnológica, según avanzó el rector Manuel Palomar.
Entre los objetivos de desarrollo de este año uno de los proyectos estrella será este edificio pionero que supone un paso más en el parque científico de la universidad. Las previsiones del vicerrector de Campus y Tecnologías, Rafael Muñoz, es que la primera fase del inmueble pueda estar disponible para las empresas a principios de 2018 y continuar por fases durante tres años hasta completar los 30.000 metros cuadrados previstos.
El edificio para empresas de base tecnológica constará de 48 espacios para que se ubiquen las firmas que lo deseen. Si una empresa por su envergadura necesitara dos espacios no tendrá problema en conseguirlos, explicó Muñoz. La única premisa que deben cumplir es tener una base tecnológica de investigación pero las instalaciones estarán abiertas a cualquier sector. Y también se trasladarán allí empresas participadas por la propia universidad que cumplan este perfil.
«Van a ser unas instalaciones pioneras con la tecnología más moderna que hay actualmente. Existen otros campus con este tipo de servicio en sus parques tecnológicos pero éste de la Universidad de Alicante se convertirá en el más puntero porque la tecnología avanza a un ritmo tan rápido que no hay ninguno en España actualmente con la tecnología que tendrá el nuestro», aseguró el vicerrector.
Este gran proyecto lleva años a la espera de poder realizarse y poco a poco va tomando forma para llegar a ser una realidad en los plazos previstos.
Elevado presupuesto
El presupuesto inicial para este inmueble rondaba los 30 millones de euros, pero tras la crisis el equipo del vicerrectorado deberá recalcularlo aunque, en todo caso, Muñoz estima que el coste ascenderá a unos 25 millones. La Universidad financia este «clúster» con fondos propios y la previsión es que esté terminado antes de que finalice la legislatura del actual equipo rectoral. Para ello cada año destinará entre seis y siete millones, indicó Muñoz. No obstante, si la Universidad consiguiera fondos externos los plazos se podrían acortar y las distintas fases acabarían antes de lo previsto. Los retrasos por tanto se han debido a la falta de liquidez.
La Universidad recibirá este año 121,6 millones de euros de la Generalitat, lo que supone la misma cantidad que el año pasado. Para poder mantener las cuentas y no tener que «tocar» las partidas académicas o de personal se ha visto obligada a recortar en inversiones. No obstante, los proyectos previstos, como este edificio, se irán realizando sólo que de forma más lenta y por fases, adelantó Muñoz.
Visita a las obras
De hecho, la urbanización de los 160.000 metros cuadrados donde se incluirá este espacio estará concluida para la primera quincena de febrero. Precisamente hoy la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, visitará junto al rector el estado de estas obras de urbanización.
Este espacio ya alberga el edificio de Petrología, el Animalario, los Institutos de Investigación, los Servicios Técnicos de Investigación, la incubadora, la planta fotovoltaica y los invernaderos que esperaban la urbanización de la zona para poder estar conectadas con el campus a través de y estar dotadas de servicios básicos.
Cuando finalice la urbanización se podrán dividir las parcelas para futuras construcciones y se plantará el arbolado.
