Un intendente principal, tres inspectores, oficiales y agentes formarán el operativo que protegerá la Cabalgata principal de Alicante, formado por más de 200 efectivos entre agentes y voluntarios de Protección Civil, con refuerzo de Policía Nacional. Este será el dispositivo para el desfile, según afirmó ayer el concejal de Seguridad, Fernando Marcos, quien negó que todo el operativo fuera a quedar en manos de un inspector, como ha denunciado en un escrito por registro CC OO, alarmado al creer que no se atendían las directrices acordadas para grandes eventos al estar en alerta 4 antiterrorista.

Marcos admitió que hay dos miembros de la cúpula policial de baja y alguno de vacaciones «pero estará un intendente porque no puede recaer la responsabilidad sobre un inspector». Y añadió que se ha contestado al sindicato en tiempo y forma. En cuanto a las patrullas que se situarán en los cruces, no se quiso desvelar ni lugares ni cantidad por seguridad aunque habrá, dijeron, de Policía Local y Nacional, y camiones de bomberos.

El tráfico para ir preparando la Cabalgata se cortará a las 17 horas, aunque desde por la mañana se irán colocando las cinco mil sillas que habrá en el recorrido, a un precio de tres euros, para las que desde el próximo año se abrirá una lista de espera. Todo el itinerario estará vallado para proteger a los niños y la orden de la organización es que los caramelos y regalos se tiren hacia el público a una distancia prudencial, no demasiado cerca de las carrozas. Habrá una zona reservada para personas con movilidad reducida en la Rambla, a la altura del Museo de Hogueras. Tienen tanto éxito estos actos que las 6.000 invitaciones para ver a los Reyes en la plaza de toros ya están agotadas.