La tradicional cremà de las 27 hogueras en conmemoración del milagro de las 27 lágrimas de sangre que lloró la Mare de Déu pondrá el punto y final por la noche al primer día festivo, según explicó el párroco Vicente Estevan.

Devotos y fieles participarán mañana en el traslado procesional a las 10 horas del icono de la Mare de Déu, que conserva las manchas de sangre de las lágrimas, hasta la parroquia de Santa María, donde permanecerá durante tres días. Tras su llegada, se producirá la multitudinaria ofrenda de flores seguida de una eucaristía que presidirá a las 12 horas el arzobispo de Valencia, monseñor Agustín García-Gasco.

Las fiestas concluirán el próximo sábado con el retorno procesional de la Mare de Déu a su monasterio y, posteriormente, la veneración del icono de la Virgen por todos los fieles y devotos de Cocentaina.

El milagro de las 27 lágrimas de sangre se produjo el 19 de abril de 1520 cuando "el sacerdote de la capilla de San Antonio Abad, Onofre Satorre, terminaba sus oraciones de la misa y al levantar la mirada observó cómo la imagen de la Mare de Déu derramaba por sus ojos lo que parecían ser lágrimas de sangre", según el párroco. Concluida la misa, "hizo que bajasen la imagen y tomándola en sus manos vio que, realmente, eran lágrimas de sangre". Para asegurarse más, "con el dedo de una mano tocó una lágrima bajo el ojo izquierdo y le dejó la señal de la sangre, como presenciaron los asistentes", precisó.