La Agencia Estatal de Meteorología prevé el temporal que ha barrido la provincia desde el pasado viernes dejando registros de cerca de 400 litros por metro cuadrado en zonas como el embalse de Beniarrés de paso a partir de hoy a una semana anticiclónica con nubes y claros y máximas de 17 grados que se prolongará hasta el día de Navidad. Una situación típica además del comienzo del invierno en el que el anticiclón suele acompañar a la provincia. No obstante, los expertos calculan que la estación que estamos a punto de comenzar venga marcada por un aumento de las precipitaciones. En cuanto las causas de la gota fría que afectó a la provincia entre la madrugada del sábado y ayer lunes, se trata de una situación extraordinaria pero tampoco ha sorprendido a los expertos debido a que el otoño ha sido muy cálido y todavía el agua del mar se encontraba tibia, en torno a los 20 grados en muchos puntos de la franja litoral.

La Confederación Hidrográfica del Júcar decidió ayer, por otro lado, iniciar el procedimiento de laminación de agua de los embalses valencianos de Bellús y Beniarrés para aliviar la crecida de caudal.

El comité de emergencia de la CHJ, adoptó esta decisión por el temporal de lluvias que había llenado los embalses. El temporal ha dejado 400 litros por metro cuadrado en la localidad de Beniarrés, 329,2 en Pinet, 317 en Millena y 306,6 en Muro de Alcoi, donde se cortaron varias carreteras secundarias por la crecida del río Agres. Además, hubo otras 20 localidades en la que se han acumulado más de 200 litros, todas ellas al sur de la provincia de Valencia y norte de Alicante.

En Orihuela se acumularon140 l/m2 desde el día 16, de los cuales 90 l/m2 cayeron en las últimas 24 horas. El Centro de Coordinación de Emergencias decretó la situación 2 Plan de Inundaciones Comunidad Valenciana por los daños que puedan producir todavía posibles desbordamientos en la Vega Baja, donde sus vecinos sufren las consecuencias de la alteración de los cursos fluviales. Ramblas sin agua que se piensa que nunca llevarán agua hasta que llega un temporal como el del fin de semana.

Las tormentas fueron también muy intensas durante la madrugada en Alicante, y en la comarca valenciana de la Safor con viento racheado de más de 70 km/h. Así, en Oliva dejó 31 l/m2 acumulados en sólo media hora con vientos de hasta 72 km/h. El Puerto de Alicante fue el único que no tuvo que cerrar sus instalaciones.