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Luto en Novelda y Aspe

Los municipios natales de Vicente Sala y María del Carmen Martínez respectivamente, se mostraban ayer vivamente conmocionados por el trágico suceso

Novelda y Aspe, los municipios natales de Vicente Sala y María del Carmen Martínez respectivamente, se mostraban ayer vivamente conmocionados por el trágico suceso. En este sentido, Armando Esteve, primer edil de Novelda, condenaba rotundamente los hechos al tiempo que aseguraba que «esto nos duele a todos». «Desde el Ayuntamiento de Novelda queremos dar todo nuestro apoyo a la familia, una familia de consideración y vinculada muy estrechamente a nuestra localidad. Ha sido algo inesperado y absolutamente condenable», afirmó.

Palabras que siguen el mismo camino que las del primer teniente de Novelda, Rafa Sáez, quien aseguró sentirse impactado en cuanto conoció la noticia del asesinato. «Es algo inexplicable que estas cosas le ocurran a gente como a ella (María del Carmen, viuda de Vicente Sala). Estoy perplejo, sin palabras... Porque he hablado varias veces con ella, y siempre vi a una mujer buena y valiente...», agrega Sáez.

Por su parte, el exalcalde de Novelda Mariano Beltrá apuntó también «el profundo dolor que siente este municipio por la trágica pérdida de María del Carmen. Ella siempre ha estado muy ligada a Novelda, la patria de su marido. El matrimonio siempre acudía, por ejemplo, a la Romería de la Bajada de la Patrona de Santa María Magdalena. La vinculación siempre ha sido tan estrecha con el pueblo que la familia sigue teniendo aquí su casa modernista, en la calle Jaume I». El exalcalde añadió, además, que el suceso ha causado estupor y asombro en el municipio, porque María del Carmen siempre fue una persona «que desempeñó perfectamente su papel acompañando a Vicente Sala junto a él, muy correcta, pero jamás se había visto envuelta en ningún comentario ni noticia sobre su figura, ni siquiera en los tiempos más difíciles de la CAM».

Salvador Sánchez Arnaldos, exalcalde de Novelda y amigo íntimo del matrimonio, apuntó que «es algo inexplicable, María del Carmen era una mujer muy valiente». «La gente del pueblo está muy extrañada porque era una familia muy buena y leal. En estos momentos me acuerdo de la familia y quiero enviar mi más sentido pésame a los cuatro hijos del matrimonio», agregó.

Antonio Puerto, alcalde de Aspe, lamentó lo ocurrido y ha transmitido a la familia de la fallecida las condolencias del pueblo de Aspe «hacia una paisana que ha sufrido una muerte atroz». Puerto también ha expresado su confianza en que la investigación avance y el autor o autores sean detenidos.

Aunque María del Carmen trasladó su domicilio a Alicante cuando se casó con Vicente Sala, esta siguió manteniendo vínculos con su población natal. De hecho, su hermana Antoñita mantiene la propiedad de un chalé cerca de la Columna de la Virgen y la casa familiar de la calle Castelar, a donde María del Carmen solía acudir todos los años para pasar unos días durante las fiestas patronales de agosto en honor a la Virgen de las Nieves.

También era habitual verla en la festividad de Todos los Santos visitando en el cementerio de Aspe el panteón familiar donde reposan los restos mortales de sus padres.

Carlos Aznar, cronista oficial de las fiestas de la villa de Aspe, la recuerda como una mujer «muy simpática y agradable» y colaboradora de entidades y tradiciones locales. Precisamente María del Carmen Martínez cedió a la comisión de Fiestas de Aspe durante varios años en la década de los 90, y de forma totalmente gratuita, unos almacenes de su propiedad por herencia familiar situados en la avenida de Navarra, en los accesos al casco urbano de Aspe desde Novelda. Y allí se montó la barraca popular de las fiestas patronales durante varios años hasta que se buscó un nuevo emplazamiento.

También recuerda Carlos Aznar, cronista oficial de fiestas, la presencia de María del Carmen Martínez junto a su marido durante los actos conmemorativos de la rehabilitación del Teatro Wagner. En dicha ceremonia intervino Vicente Sala y dijo que el teatro aspense le traía muy buenos recuerdos porque la casa de su entonces novia, María del Carmen, se encontraba muy cerca de allí, en la calle Castelar.

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