La patrulla bus canina; la casa de muñecas Villa María; los personajes de la serie de Disney Los Descendientes; Poppy, un muñeco con 25 frases, luces y música de las canciones de la película; las Ladybug; los Perplexus Epic, una especie de esfera que da inverosímiles giros; y los patines roller y patinetes. Este año son los juguetes estrella, los que los niños encargan a Papa Noel y/o a los Reyes Magos. De hecho se agotan cada semana en los centros comerciales y jugueterías de la provincia, que no dejan de reponerlos para atender las peticiones.

El juguete tradicional también es muy buscado, sobre todo el que se reinventa en interactivo, que plantea nuevos retos a los niños. Es el caso de las muñecas que «aprenden, se convierten en heroínas y te proponen nuevos experimentos», explican desde la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes.

«Las muñecas estrella de esta Navidad despertarán el lado más aventurero de los niños. Soñar con nuevos mundos desconocidos donde convertirse en el héroe de la historia, llevar a cabo experimentos de vital importancia para la humanidad, descubrir mundos de magia», indican en su página. Como dijo el presidente de la entidad, José Antonio Pastor, durante la presentación de la campaña, los juguetes tradicionales volverán a ser protagonistas, aunque cada vez con un mayor componente tecnológico para fomentar la interactividad. También tienen buena salida los coches y otros vehículos, incluso con pistas de inteligencia artificial.

Los juegos de mesa triunfan porque unen a familia y amigos alrededor de una mesa en estas fechas, y son un clásico de la Navidad. Y en la línea de los últimos años, mascotas interactivas para que los niños las cuiden.

Entre los regalos tecnológicos la demanda está en el iPhone 7, la Play Station, las cámaras fotográficas y de vídeo para aventura GoPro, y los drones. Así como los segways, vehículos de dos ruedas que los turistas utilizan para desplazarse por los centros históricos y que se están vendiendo muy bien desde el Black Friday. Sea como sea, las previsiones de la asociación están en un gasto medio por niño de 150 euros. Será un 5% más, otro síntoma de recuperación.