El Arca de Noé, el centro de recuperación de animales exóticos y salvajes que dirige Raúl Mérida en Villafranqueza, sirve de referencia al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) para el traslado de los animales que interviene, víctimas del maltrato o del tráfico ilegal. En el último año, desde el Seprona han trasladado al que se refieren como «único centro de recuperación» de la Comunidad Valenciana a más de medio centenar de animales. El Arca de Noé colabora con el Ministerio de Hacienda y es referente para la propia Generalitat, que recientemente le ha pedido ayuda para que se haga cargo de los caballos maltratados o abandonados recogidos en toda la Comunidad.

En un escrito rubricado a mediados de noviembre, la Dirección General de Agricultura y Ganadería, firma una «declaración de nterés» para contar con la colaboración del Arca de Noé para la recogida de los equinos abandonados «teniendo en cuenta la necesidad de proporcionar unos criterios mínimos de bienestar animal y sanidad en estos animales que puedan ser rescatados y depositados en un centro autorizado para ello». Una especialización que desde el Arca de Noé están dispuestos a asumir.

Tanto la Generalitat como el Seprona avalan la labor que desarrolla el Arca de Noé en la recuperación de especies, sin recibir subvenciones y manteniéndose con donativos. La propia Generalitat, en una inspección realizada el 26 de enero de 2015, concluía que las instalaciones cumplen con la legislación para su funcionamiento. Otro informe del Seprona, de febrero de 2014, destaca la colaboración del Arca de Noé en la acogida de los animales salvajes intervenidos. Diferentes convenios de colaboración con la Universidad de Alicante, para prácticas y proyectos de investigación, también respaldan la labor del centro, donde tratan de recuperar a los animales para después reubicarlos en su hábitat. Así ha ocurrido, por ejemplo, con algunos leones decomisados por el Seprona enviados a una reserva en Sudáfrica. Una operación que no se ha podido hacer, según explican desde el Arca de Noé, con otros leones por estar enfermos y muy mayores.

Con todo, desde el grupo municipal de Guanyar quieren cerrar las instalaciones y retirarle el contrato por el que en 2008 se le cedió suelo municipal. La edil de Protección Animal, Marisol Moreno, quiere trasladar allí la protectora municipal (ahora en Bacarot, en suelo de la Generalitat) y esgrime para ello que el Arca de Noé carece de permisos para albergar algunos animales y realizar visitas, algo que desde el centro contradicen con informes de la Generaliat y del Ayuntamiento, que le autoriza a realizar labores docentes y formativas.

En contra de la posición de Guanyar están sus socios de gobierno del PSOE, que defienden la labor del Arca de Noé y abogan por concederle la prórroga de tres años que ha solicitado. En este asunto, la posición de Compromís es decisoria y, ante la posibilidad de perder la votación en la Junta de Gobierno Local del lunes, el alcalde, Gabriel Echávari, decidió aplazar la decisión al viernes. Un intento de ganar tiempo y de evitar que sus socios de Compromís y Guanyar fuercen el cierre de las instalaciones.

El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, no ha querido avanzar qué hubiera votado el lunes ni qué votará el viernes. Su intención es tratar de buscar una salida intermedia podría plantear una prórroga de un año y no de tres que le permita sortear la división en sus filas, entre quienes quieren posicionarse con Guanyar y quienes no quieren dejar solo al alcalde, lo que rompería el tándem que, dentro del gobierno local, han formado PSOE y Compromís para estar en mayoría frente a Guanyar. Una alianza que, por ejemplo, Bellido y Echávarri han hecho valer para descartar la municipalización de servicios o en la gestión de la libertad comercial.