Varias asociaciones animalistas han convocado el domingo una concentración frente a la protectora de animales de Bacarot para pedir la rescisión del contrato, que actualmente presta Raúl Mérida, y el fin del Arca de Noé. En una rueda de prensa, con Marisa Gayo (del PP) como única concejal presente entre el público, los representantes de los colectivos animalistas han cuestionado, sin aportar pruebas, la gestión de este servicio municipal y del Arca de Noé, el centro de recuperación de animales ubicado en la carretera de Villafranqueza.

En cuanto a la protectora de animales, la presidenta de la asociación Cinco Hocicos, Mar Puig, ha asegurado que "no existe un registro de entrada y salida" de animales, que "no reciben asistencia veterinaria inmediata", que "no se respetan los periodos de cuarentena" en animales enfermos y que "no se acude" a los avisos de recogida de animales. Sostiene que la agrupación recibe 157.000 euros de dinero de diferentes ayuntamientos y que "lo que falta no son medios". Al respecto, exige "al responsable final, que es el Ayuntamiento, que estas prácticas cesen". En su opinión, "hay un monopolio" y plantean que se gestione por otras personas, lo que iría en la línea de la intención ya planteada por la edil de Protección Animal, Marisol Moreno, de que asociaciones animalistas opten a hacerse cargo del mismo.

La presidenta de Dignidad Animal, Saturnina Martínez, asegura que cuentan con el respaldo de una veintena de asociaciones animalistas, de Esquerra Unida, de Podemos y del sector animalista de Compromís "que está a expensas del apoyo de su ejecutiva". El voto de Compromís es clave, dado que el PSOE ya ha mostrado su apoyo a Mérida y su intención de prorrogar tres años más el contrato de cesión de suelo para el Arca de Noé, en contra de lo que pretende su socio de gobierno de Guanyar.