Los grupos de la oposición del PP y Ciudadanos cargan contra el tripartito por el retraso en la licitación de las inversiones pendientes, lo que impedirá que 3,3 millones de euros se destinen a la ejecución de nuevos proyectos y obligará a usar ese dinero para pagar deuda. Ambos grupos consideran que detrás de ese retraso se encuentran las discrepancias y la descoordinación del tripartito. El alcalde, por su parte, considera que todavía queda un mes para licitar proyectos y achaca el retraso a los problemas para obtener permisos de la administración estatal, como ocurre en el caso de la remodelación de la carretera de Urbanova. Echávarri considera que el hecho de que hubiera un Gobierno en funciones «ha parado muchas cosas».
Como avanzó este diario, de los 7,1 millones de euros del remanente del año anterior que, hace seis meses, el tripartito anunció que destinaría a inversiones de carácter sostenible, finalmente sólo se utilizarán 3,8 millones de euros para 25 proyectos que deben estar ejecutados antes de que acabe el año. El resto, 3,3 millones de euros no se utilizarán y se tendrán que destinar a pagar deuda.
El portavoz del PP, Luis Barcala, considera que la pérdida de esos 3,3 millones para inversiones obedece a «la mala gestión de las concejalías del tripartito». En su opinión, «'retraso' es la palabra que mejor define a este tripartito» y considera que «el desastre que tiene el tripartito en sus concejalías le está llevando a desaprovechar inversiones que son también un motor para la economía de la ciudad y por segundo año consecutivo». Al respecto, apunta que «si en lugar de estar generando líos se centraran en trabajar, estas cosas no pasarían».
El concejal de Ciudadanos Antonio Manresa coincide en que «las desavenencias y la descoordinación» del tripartito están detrás del retraso en la definición y tramitación de las inversiones. Un «retraso» que, sostiene, «paga la ciudad de Alicante, que está falta de inversiones».
