El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Alicante, Luis Barcala, aseguró ayer que su grupo «pedirá este lunes todos los informes de los que disponga la Concejalía de Seguridad sobre el plan para reestructurar la Policía Local y dividirla en cuatro distritos». «Queremos tener todo el conocimiento sobre un asunto que amenaza con dejar en precario unidades especializadas que son de vital importancia», añadió ayer el dirigente popular, tras desvelar este diario un informe del responsable y fundador del Gabinete de Violencia de Género (GAVID) de la Policía Local de Alicante remitido al jefe del Cuerpo en el que advierte del retroceso que conllevaría que un mismo mando dirija el área de violencia doméstica y los atestados de tráfico. Barcala criticó ayer también al alcalde, Gabriel Echávarri, por «su afán en destruir todo lo que hizo bien anteriormente el gobierno del PP».
Fuentes del área que dirige Fernando Marcos (PSOE) aseguraron que se «estudiará» el informe remitido por el jefe de violencia doméstica en la Policía Local. «La concejalía estudiará este informe como todos los que llegan. Por ahora no hay ninguna propuesta definitiva», añadieron las mismas fuentes. Por su parte, desde Alcaldía subrayaron el compromiso del regidor socialista, Gabriel Echávarri, con la lucha contra la violencia de género.
El jefe del GAVID no es el único mando policial que ha cuestionado el plan para reestructurar la Policía Local, diluyendo unidades especializadas en favor de una atención generalista, en la que todos los policías hagan de todo. Para los mandos el plan supone una «involución» y es inviable por la falta de personal y de medios.
Malestar, según la oposición
Por su parte, el concejal del PP José Ramón González considera que la reestructuración prevista en la Policía Local, para distribuir a los agentes en cuatro distritos, supone «un retroceso importantísimo» que tendrá un efecto directo sobre la prestación de los servicios y también sobre las arcas municipales. El concejal asegura que, tras consultar con agentes, oficiales y mandos del Cuerpo, ha detectado una sensación «generalizada de malestar» con el cambio propuesto desde el área de Seguridad. Una modificación que, según incide González, conllevará el desmantelamiento de unidades como Ocupación de la Vía Pública y Grúas, que «serán divididas y repartidas en cada uno de los distritos». En el caso de la unidad de Ocupación de la Vía Pública, González advierte de que su eliminación como tal puede llevar aparejado «un repunte al alza de la venta ambulante y de las infracciones de veladores», pues esgrime que los agentes de esta unidad especializada «ya conocen a los dueños, los horarios, las costumbres...». González niega además que vaya a haber más Policía Local en la calle, como argumentan desde Seguridad, y sostiene que, pese a lo que asegura el edil del área, Fernando Marcos, aumentará la carga administrativa «con la creación de una plana mayor». El edil del PP incide en que este modelo es «similar al de hace 26 años, que ya se demostró que no era útil».
El edil popular cuestiona, igualmente, que el Gabinete de Atención a las Víctimas de Violencia Doméstica y la unidad de Atestados vayan a pasar a «compartir mando» y advierte de la merma en el servicio. En cuanto a las condiciones laborales de los agentes, González asegura que, frente a las afirmaciones de Marcos sobre que no se modificarán, los propios trabajadores le han trasladado que, en algunos casos, se retirarán complementos o jornadas de conciliación, además de la libre disposición a los agentes que atienden las incidencias informáticas de las cámaras y radares.
Por todo ello, desde el PP de Alicante exigen «retirar el organigrama» presentado y que «se negocie con sindicatos, trabajadores y también partidos políticos».
