«Es una atrocidad lo que pasó. No se puede repetir algo así en la humanidad». Los estudiantes del Instituto Cabo de Las Huertas han llegado muy marcados tras vivir en primera persona lo que sufrieron miles de judios en el campo de concentración de Auschwitz.
Ha sido uno de sus destinos Erasmus dentro del programa educativo liderado por el instituto con la Universidad de Alicante y otros cuatro países europeos. «Cualquier proyecto internacional enriquece al alumno, pero situaciones como estas te marcan la visión del mundo y de la justicia de forma muy diferente que si únicamente las estudias en un libro de texto», comparte la profesora y coordinadora, Candela Bueno.
Han pulsado el horror y el sufrimiento de los presos gracias al esfuerzo que decidieron hacer sus profesores. Eran 9 horas de autobús, de norte a sur de Polonia, «una oportunidad que no quisimos desaprovechar porque es el centro de la mayor vulneración de los derechos humanos del tiempo contemporáneo», suscriben.
El tema del proyecto, «Los derechos humanos en una Comunidad Europea de valores», no podía conjugarse de forma más realista. «Ha contribuido a su inmersión en la injusticia y la necesidad de contribuir para que no se vuelva a repetir algo así», añaden.
Al derecho a la igualdad religiosa y de pensamiento que les llevó a Polonia, le ha seguido Italia con el derecho al trabajo. A lo largo del curso visitarán a su vez Finlandia y Alemania, donde profundizarán sobre el derecho de las minorías y el derecho de los refugiados, de plena actualidad todos ellos, para concluir en Alicante con el derecho a la igualdad de género.
«Levantar sus conciencias es el primer paso para cambiar la sociedad a mejor», explica Candela Bueno. La extensión a las aulas de este ambicioso programa Erasmus ka2-201, -cuya calificación superior solo han logrado en toda España otros dos centros de Granada, por la participación de una institución superior, en este caso la UA con el profesor Antonio Murcia Conesa-, se traduce en un trabajo pluridisciplinar y transversal en todas las asignaturas.
En Matemáticas y Geografía los estudiantes recogen datos relacionados con la justicia medioambiental, delimitando las zonas verdes de los barrios de Alicante, calculando su superficie y la proporción con respecto al total y la densidad de población, para elaborar un informe sobre el distinto acceso a las zonas verdes aquí y en comparación con el resto de los países europeos que participan en el programa.
En las clases de Valenciano, Castellano y Educación Física, analizan el lenguaje sexista en los medios y elaboran estadísticas sobre el porcentaje de hombres y mujeres en las distintas actividades cotidianas.
El programa concluye en el plazo de un año con la exposición de las conclusiones en Casa Mediterráneo y un concierto con los demás alumnos europeos en Las Cigarreras.
