A un mes y medio de la Navidad, el Museo de Belenes de Alicante, uno de los más visitados de la ciudad, está cerrado. Lleva así desde el verano, principalmente por los recortes de la Concejalía de Cultura, que no puede cubrir la baja del conserje de esta dotación situada en la calle San Agustín, en el Casco Antiguo. Además, en septiembre se procedió a realizar una reforma: la ampliación del aseo para adaptarlo a minusválidos. El Ayuntamiento anuncia su reapertura para el próximo día 21.
En un cartel en castellano y en otro en valenciano colocados en el exterior del Museo, la Concejalía de Cultura explica a los ciudadanos la imposibilidad de contratar personal que cubra bajas por el plan de ajuste, lo que está provocando el cierre puntual de equipamientos culturales de la ciudad.
«El Ayuntamiento de Alicante se encuentra doblemente afectado por el plan de ajuste 2012-2022 y por la ley de presupuestos generales del Estado 48/2015. El gobierno municipal de la alcaldesa Sonia Castedo tomó la decisión de acogerse a estas figuras por la falta de liquidez del Ayuntamiento (...) Como consecuencia, a día de hoy no se puede contratar personal a no ser que sea declarado servicio esencial, y sólo se pueden cubrir el 50% de las bajas por jubilación hasta 2022, lo que también ha mermado el personal», reza en el cartel. Afirman que Cultura y Recursos Humanos ponen todo su «celo profesional» en cubrir todos los equipamientos culturales de la ciudad (museos, salas de exposiciones, bibliotecas, aulas de cultura, servicios lúdicos culturales en parques) pero cuando coinciden diversas circunstancias entre los auxiliares de servicio de estos equipamientos nos podemos ver en la obligación de contemplar el cierre de instalaciones». Se refieren a bajas médicas, de larga duración, reducciones de jornada, horas sindicales, asuntos propios o vacaciones.
Cultura añade que están intentando que el Gobierno Central entienda que se deja de prestar un servicio público esencial pero mientras tanto se ve obligada, indica, «contra su voluntad y después de haber agotado toda posibilidad de reorganización del personal disponible» a hacer cierres temporales como el de este museo.
La Asociación de Belenistas reabrirá con su personal la dotación el domingo de 10 a 13 horas para un mercadillo navideño. El presidente del colectivo, Alejandro Cánovas, asegura que es uno de los museos más visitados, con 30.000 personas al año. Ocupa un local alquilado del Patronato de la Vivienda y se completa con otro de un particular, por el que el Ayuntamiento también paga arrendamiento.
