La Concejalía de Memoria Histórica rectificará su intención inicial de cambiar el nombre de la glorieta de la División Azul por la del Pueblo Gitano. Este espacio cambiará de nombre, pero pasará a llamarse "plaza de la Igualdad" a petición, según fuentes municipales, del colectivo gitano. Esta modificación de la propuesta inicial para cambiar el nombre a 46 calles y espacios públicos no será la única. Memoria Histórica ya dio marcha atrás en su intención de cambiar la ubicación de la calle Lassaletta de Babel al centro de la ciudad ante el rechazo de los vecinos que residen en ese vial.

Los cambios se producen tras un periodo de alegaciones y el listado definitivo de nombres de calles a eliminar del callejero de Alicante por contravenir la Ley de Memoria Histórica se someterá a aprobación en la Comisión de Memoria Histórica convocada el próximo lunes por el Ayuntamiento antes de elevarlo a la Junta de Gobierno Local.

El portavoz del PP, Luis Barcala, ya adelante que su grupo votará en contra de la propuesta definitiva de cambio de calles realizada por el tripartito tras ser rechazadas todas sus alegaciones. Barcala critica "la falta de talante y la intransigencia del tripartito por desestimar todas las alegaciones presentadas por el PP, y seguir adelante con una medida que va a suponer un importante coste para las arcas municipales, que tendrán que sufragar todos los alicantinos, y un trastorno hasta cierto punto innecesario para los vecinos que se vayan a ver afectados por estos cambios".

El dirigente popular ha explicado que "han rechazado todas las alegaciones que planteamos porque considerábamos que los nombres de las calles que indicábamos no tenían nada que ver con el franquismo ni con la Guerra Civil", y cita los nombres de "la plaza de Calvo Sotelo y la calle Vázquez de Mella, que pese a reconocer que nada tienen que ver con la Guerra, argumentan como motivo de su supresión el hecho de que fueron rotuladas después de la Guerra Civil con una 'intención revanchista'. Al igual que también hicieron una interpretación con la calle Reyes Católicos en donde el tripartito lo estudió por si era "netamente franquista y también fue rotulado tras la Guerra Civil".

Barcala sostiene que "quitan ciertos nombres por su ideología pero es evidente que otros los proponen precisamente por tener otra ideología, concretamente la ideología de izquierdas cercana al tripartito, como es el caso de Adelita del Campo o Clara Zeltkin, entre otras".