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Antonio Gil Olcina: «Los cultivos son los que hay, cambiarlos sería una estupidez»

Antonio Gil Olcina: «Los cultivos son los que hay, cambiarlos sería una estupidez» isabel ramÓN

El profesor Antonio Gil Olcina, uno de los fundadores de la Universidad de Alicante y referente en temas de clima y agricultura en España, subraya que la potencia lumínica natural de Alicante no se puede trasladar de un punto a otro, el agua sí, y aporta soluciones.

Antonio Gil Olcina recibía anteayer el homenaje de los climatólogos españoles en el marco del X Congreso que se ha celebrado en Alicante.

Octubre y ni gota fría que alivie la sequía.

Históricamente, esta tierra ha sido la de las rogativas para pedir agua. El tema de la sequía es natural y no debe considerarse una excepción. Sería excepcional que pase una década sin que haya un episodio de sequía. O sea, que cada diez años hay uno por lo menos. En estos momentos, la sequía es de doble signo. No sólo mediterránea, sino que faltan también las borrascas atlánticas. Y, además, el ciclo seco no sólo nos afecta a nosotros sino también a las cabeceras del Segura y del Tajo.

Los políticos dicen que no se cerrará el Tajo-Segura.

Es un error grave considerar que la desalinización debe convertirse en el recurso para obtener agua. En la medida que se vaya consolidando esta práctica se va a ir condicionando el trasvase. El Tajo tiene unas posibilidades enormes, pero hay que hacer la planificación con referencias climáticas, que ha sido el gran error en este país. Si hubiera habido referencias, se hubiera sabido que la sequía coincide en la cabecera de Tajo y en Alicante. Lo que no es de recibo es que en el Tajo-Medio la pluviometría alcance en Gredos los 2.500 litros por metro cuadrado al año, y España tenga que entregar 2.700 hm3 a Portugal por el convenio de la Albufeira y, encima, les entregamos el triple. El problema en la cuenca del Segura estaría resuelto simplemente con que en la cuenca del Tajo se hiciera una planificación teniendo en cuenta la referencia climática, que ahora existe.

¿Y eso cuesta dinero? Parece sencillo.

Cuesta dinero pero mucho menos de lo que se piensa. Lo que no tiene sentido son los problemas interterritoriales y que provincias como Alicante y Murcia tengan graves dificultades para producir una agricultura muy importante. La cabecera del Tajo tiene problemas de sequía, pero la desalinización solo resuelve problemas puntuales, no es la panacea universal.

¿El avance de la sequía y la falta estructural de lluvias provoca ya que haya cultivos en serio riesgo de desaparición?

Es una realidad. Si la agricultura competitiva de Alicante y Murcia es de exportación y se asumen riesgos importantes, lo que no es de recibo es que no se le garantice el agua.

¿Habría que pensar en replantear las producciones agrícolas que se realicen en algunas comarcas de la provincia?

Si hay algo que hace a nuestra agricultura realmente competitiva es el potencial lumínico y energético. El que procuran casi 2.800 de luz del sol al año, de las cuales casi 1.200 de octubre a marzo. Incluso en diciembre tenemos 180 horas de sol. Los cultivos son los que son, los adecuados y los que hacen posible una agricultura competitiva y fuente de empleo de primer orden. Con lo que no queda otra que asegurar el suministro de agua para Alicante. Lo otro sería una estupidez.

¿El agua residual depurada y el caudal desalado ofrecen garantías reales para que la producción agrícola siga como hasta ahora?

Ahí tenemos el Consorcio de Aguas de la Marina Baja logrando un agua de gran calidad con terciario avanzado y una desalobradora, pero así y todo hace falta agua. Pero, insisto, hay situaciones en el año en las que la sequía aprieta y en el Tajo hay 7.000 hm3 embalsados.

¿Alguien hizo mal el trasvase Tajo-Segura?

No saquemos las cosas de contexto. Es una obra extraordinaria realizada por los mejores en su época, pero nadie puede pensar que en los años 30 hubiera conocimientos climáticos como los que hay ahora. Ahora bien, lo que sí es imperdonable es que hoy sigamos igual cuando el conocimiento del clima ha avanzado sustancialmente. El Tajo-Segura lo diseñaron los mejores de la época.

¿Y el Júcar-Vinalopó tiene solución?

El Instituto Universitario de Geografía ha puesto a disposición de todo el mundo con datos oficiales de la Confederación del Júcar cómo está la calidad del agua en el Azud de la Marquesa. Pero, realmente, el problema del Júcar es la sobreexplotación del acuífero de la Mancha Oriental. En cuarenta años han pasado de 5.000 hectáreas de cultivo y una extracción de 29 hm3, a 135.000 hectáreas y extracciones que en algún año han alcanzado los 400 hm3. Antes de la regulación, el Júcar era un río extraordinario. En 1906 se tendió una línea eléctrica de 250 kilómetros para suministro eléctrico de Madrid con energía hidráulica.

Entonces, mano dura con la Mancha Oriental y toma de Cortes de Pallás.

La cuestión es si prevalece o no el Supremo Interés Nacional del primer plan de obras hidráulicas de Indalecio Prieto. Es el gran problema. Si no cuenta, hablar de trasvases carece de sentido.

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