El equipo de gobierno tripartito del ayuntamiento de Alicante ha informado de que se considera totalmente controlado el foco puntual de roedores que se ha registrado en las últimas fechas en pleno casco antiguo, concretamente en torno a la calle Miguel Soler.

En un comunicado, el ayuntamiento ha informado de que la empresa concesionaria del servicio ha informado de que la plaga detectada se halla en una situación de "pleno control" después de la intervención de la empresa concesionaria de la Mancomunitat de l'Alacantí.

Esta acción, realizada en coordinación con la Concejalía de Sanidad, ha supuesto "la erradicación del problema puntual detectado en un inmueble particular del casco antiguo".

"Gracias a la mediación de la Concejalía y la facilitación del acceso por parte del arrendatario, los servicios de desratización bajo la presencia de la autoridad sanitaria localizaron la pasada semana el foco de la presencia de roedores procediendo a su eliminación a través de la acción de rodenticidas sólidos, además de la dispensación añadida de productos insecticidas inocuos para el ser humano", ha indicado la nota.

La actuación emprendida inicialmente a las 11.30 horas del lunes 5 de septiembre ha sido monitorizada de forma permanente por los servicios sanitarios y Lokímica, la empresa concesionaria, realizándose continuas acciones de chequeo y control a lo largo de la última semana tanto en el interior del inmueble como en el exterior.

El control se fijó también para los horarios vespertinos y nocturnos a fin de comprobar que los roedores no salían al exterior, circunstancia que se cumplió plenamente al haberse sellado los orificios presentes en la planta baja y la acción eficaz de los productos utilizados.

Tras esta labor de erradicación se ha podido comprobar en la última evaluación realizada en la mañana de hoy que el foco de roedores está plenamente controlado y se ha acabado con su presencia.

Comienza ahora una labor secundaria y de seguimiento consistente en la prevención de la posible aparición de insectos y la desodorización anticipada ante posibles malos olores.

Con todo ello, en el plazo de tres meses se finalizará un tratamiento completo al que seguirá el requerimiento al propietario de inmueble para que, más allá de la actuación subsidiaria, se realice un programa continuo de prevención de la presencia de este tipo de animales.

Este plan se alargará el tiempo necesario hasta que las condiciones interiores presenten plenas garantías. Esta obligación del propietario deberá ser, además, aprobada por la dirección facultativa de la Mancomunitat de l'Alacantí.