El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, cumplió ayer con el anuncio que había hecho unas horas antes e interpuso una demanda contra la tuitera -Marisa Abad- por acusarle de llevar a sus hijos al colegio en coche oficial. «He presentado una demanda. Asunto cerrado», aseguró ayer el regidor socialista tras un acto dentro del arranque del curso escolar, para minutos después publicar y fijar un mensaje en Twitter en el que informaba de su acción judicial. En ese texto, Echávarri añadía: «No todo vale». En la misma línea se mostraba poco antes a preguntas de las medios: «Para atacar a una persona hay un limite que es meter por medio a los hijos menores de edad [de 7 y 3 años, en su caso]. No lo voy a consentir, ellos no estan en política».

Echávarri subrayó que el próximo paso judicial será un acto de conciliación entre las partes implicadas. Si ese día en el juzgado, la tuitera mantiene su acusación -ayer, al cierre de este diario, seguían los polémicos tuits publicados en su perfil personal-, el alcalde de Alicante aseguró ayer que irá «hasta el final». «Es una afirmación radicalmente falsa, yo tengo la conciencia muy tranquila. Si no se retracta, iré hasta el final. Que los tribunales decidan si mi honor y el de mis hijos ha sido lesionado», reiteró ayer Echávarri.

La polémica surgió el pasado miércoles, cuando el alcalde respondió a través de las redes sociales a una ciudadana que le acusaba de llevar a sus hijos al colegio en coche oficial. Echávarri, a preguntas de este diario, aclaró que ese día excepcionalmente tuvo que requerir la presencia del coche oficial en el colegio para poder llegar a tiempo a una reunión en el Ayuntamiento, pero dejó claro que sus hijos «nunca» se han montado en el coche oficial.