La bandera de España que luce en la Plaza del Mar ha sido renovada una vez más gracias a la colaboración de varios vecinos de Alicante que sufragan una nueva enseña cada vez que se estropea la anterior por el efecto, especialmente, del viento. «La renovamos aproximadamente una vez cada seis meses, aunque el último cambio fue para el Día de la Hispanidad, en octubre», aseguró ayer Felipe Fuster, uno de los alicantinos que han asumido el mantenimiento de la rojigualda ubicada en el frente litoral de la ciudad, junto al antiguo Hotel Palas y a continuación de la Explanada. Fuster asegura que la renovación se ha podido producir gracias a la colaboración de los Bomberos de Alicante y de la Concejalía de Seguridad, dirigida por Fernando Marcos. «Depositamos la bandera el lunes pasado en el Ayuntamiento y el viernes ya se cambió», apuntó Fuster, agradecido por la colaboración de Bomberos y del Gobierno local de Alicante. La nueva enseña costó, según sus padrinos, unos 3.000 euros.